El "peso pesado" del PSE retorna a las tareas de logística para la campaña

Elena Puerta.

Vitoria, 29 ago.- Rodolfo Ares, "peso pesado" del Gobierno Vasco, ha enarbolado durante sus tres años de gestión como consejero de Interior la bandera de la "tolerancia cero" contra los violentos y ha podido ver el fin de la actividad violenta de ETA, logros empañados al final de su mandato por la muerte de Íñigo Cabacas por un pelotazo de la Ertzaintza tras un partido del Athletic.

El que siempre ha sido considerado "número dos" del Gobierno socialista de Patxi López, ha decidido hoy abandonar su cargo al frente del Departamento de Interior para dedicarse en cuerpo y alma a la campaña electoral de su partido, el PSE-EE, ante los comicios autonómicos vascos del próximo 21 de octubre.

Esta tarea no le es ajena ya que gran parte de su carrera política ha estado centrada en labores internas, antes como secretario de Organización y ahora de Política del PSE.

Su gran capacidad de trabajo le ha llevado históricamente a encargarse tanto de tareas ejecutivas como de estrategia electoral, una labor fundamental para los socialistas vascos en estos momentos, ante la modificación del panorama político vasco por la irrupción de EH-Bildu.

Ahora afrontará ese nuevo reto con la satisfacción de haber logrado en estos tres últimos años su objetivo de llevar a las calles de Euskadi la política de "tolerancia cero" ante los actos de "kale borroka" y de apoyo a los violentos.

Él mismo ha destacado este hecho en su despedida al frente del Departamento de Interior, en la que no se ha olvidado de las cuatro víctimas de ETA asesinadas durante este periodo, los agentes de la Policía Nacional Eduardo Puelles, Carlos Sáenz de Tejada y Diego Salvá Lezaun y el agente francés Jean-Serge Nérin.

Haber sido testigo del fin de la actividad armada de ETA y lo "mucho" que se ha avanzado en el reconocimiento de las víctimas y su memoria, son ahora sus grandes satisfacciones, frente a la "impotencia, rabia y dolor" que sintió por la muerte de Íñigo Cabacas por un pelotazo de la Ertzaintza en Bilbao tras un partido del Athletic.

Las críticas recibidas por los sindicatos de la Ertzaintza durante su mandato han quedado ahora atrás y hasta la central mayoritaria de la Policía vasca, Erne, ha calificado hoy de "globalmente positiva" su gestión en el ámbito laboral.

Este sindicato ha valorado sobre todo el impulso que Ares dio a los acuerdos para rebajar la edad de jubilación de los agentes y para el pase a la segunda actividad de los ertzainas, demandas que han defendido desde hace dos décadas.

Su peso en el partido ha sido siempre indiscutible y su sintonía con el exministro del Interior Alfredo Pérez Rubalcaba hizo que incluso se especulara con la posibilidad de que fuera uno de los hombres fuertes de la Ejecutiva socialista cuando éste accedió a la Secretaría General del PSOE.

Ahora, el "coordinador" de hecho del Gobierno Vasco y miembro del Comité Federal del PSOE asumirá nuevamente las tareas internas con el objetivo de lograr el mejor resultado electoral posible, en un momento en el que las encuestas electorales auguran que el nuevo Parlamento Vasco tendrá la composición más nacionalista de su historia.