El PSOE dice que pagó obras en el chalé de Blanco con la partida de seguridad

Madrid, 7 mar.- El PSOE ha reconocido que pagó hace unos años 100.000 euros en reformas en el chalé de su ex "número dos" José Blanco con cargo a la subvención que el Ministerio del Interior destina a los partidos políticos para sufragar gastos de seguridad.

Una partida que el año pasado superó los 3,38 millones de euros para el conjunto de las fuerzas políticas representadas en el Congreso de los Diputados.

Fuentes socialistas han señalado hoy a Efe que el partido abonó una factura de 101.000 euros correspondiente a las obras acometidas en la vivienda de Blanco entre 2006 y 2007 para mejorar la seguridad y siguiendo instrucciones de un informe realizado por la Comisaría General de Seguridad Ciudadana.

De hecho, según las fuentes consultadas, no se llevaron a cabo todas las obras recomendadas por la Policía, sino sólo las que se consideraron más importantes para garantizar la seguridad de Blanco, que en aquella época era secretario de Organización del PSOE.

La factura de las reformas en seguridad superó ligeramente los 100.000 euros, que el PSOE costeó con cargo a esa partida que reciben las fuerzas políticas desde que se aprobó en el año 2000, con José María Aznar en el Gobierno, ante la amenaza de ETA.

Todas las facturas, han insistido las fuentes, son remitidas al Tribunal de Cuentas para su correspondiente fiscalización.

Así consta también en el recurso que ha interpuesto la defensa del exministro contra la providencia del instructor del caso Campeón en el Tribunal Supremo, José Ramón Soriano, en la que accede a las peticiones de la UDEF de investigar la compra y las obras de reforma del chalé que adquirió Blanco en la localidad madrileña de Las Rozas.

En este recurso, al que ha tenido acceso Efe, el abogado de Blanco pide la nulidad de esta providencia, entre otros motivos, porque fue dictada después de que el magistrado acordara en una resolución anterior "dar por concluida la instrucción" de este caso.

No obstante, y para no dejar "la torcida impresión de que nos acogemos a vicios de procedimiento para ocultar algo ilícito o para intentar frenar una investigación cuyo resultado podemos temer", la defensa de Blanco aporta al juez los justificantes de los pagos de esas obras, ya que de la compra recuerda que los aportaron el pasado 31 de enero.

Sobre los gastos en seguridad indican que tuvieron un coste de 101.395 euros que pagó el PSOE, gasto que fue "contabilizado y declarado ante Hacienda, tanto por el partido como por la empresa constructora", mientras que "la parte de las obras que no se correspondían estrictamente con la protección del edificio" fueron abonadas por el exministro y su esposa y costaron 68.440 euros.

Este pago se hizo en dos veces, la primera, por valor de 30.000 euros, "se realizó mediante transferencia" y la segunda, de 38.440 euros, "se realizó en metálico, empleando para ello dinero donado por sus padres", pagos ambos "reconocidos y declarados".

La principal queja de Blanco en este recurso se refiere al requerimiento dirigido a la Agencia Tributaria para que facilite a la UDEF los datos de "los números de cuenta bancaria y entidad" de Blanco y su esposa durante los años 2006 y 2011, además de aportar los extractos bancarios de las cuentas.

La defensa considera nula esta diligencia "de investigación prospectiva" por dirigirse contra la esposa de Blanco, "que no está imputada", y el hecho de "someter a escrutinio policial los movimientos de todas sus cuentas" la coloca "en una situación de indefensión total".

"Tenemos que protestar por una prueba que no tiene finalidad conocida, más que someter a injusto escrutinio policial todos los gastos domésticos de una familia" y si lo que se pretende "es cotejar los pagos de las obras de la vivienda o su adquisición, bastaba haber reclamado los justificantes" que ahora se aportan "sin problema", señala el escrito.

El Ministerio del Interior destina cada año una partida a gastos de seguridad de las fuerzas políticas en función de la Ley de Financiación de Partidos, aunque sólo aquellas que tienen escaño en el Congreso de los Diputados (no se financian los del Senado).