El PSOE salda su deuda histórica con Negrín y lo rehabilita como militante

  • Madrid.- El PSOE ha saldado hoy la deuda histórica que tenía con el que fuera presidente del Gobierno de la República Juan Negrín, y en un emotivo acto encabezado por Alfonso Guerra y Leire Pajín lo ha rehabilitado como militante a título póstumo junto a otros 35 socialistas que fueron expulsados del partido en 1946.

El PSOE salda su deuda histórica con Negrín y lo rehabilita como militante
El PSOE salda su deuda histórica con Negrín y lo rehabilita como militante

Madrid.- El PSOE ha saldado hoy la deuda histórica que tenía con el que fuera presidente del Gobierno de la República Juan Negrín, y en un emotivo acto encabezado por Alfonso Guerra y Leire Pajín lo ha rehabilitado como militante a título póstumo junto a otros 35 socialistas que fueron expulsados del partido en 1946.

Ya el Congreso federal socialista celebrado el pasado año acordó la rehabilitación de todos ellos después de que fueran expulsados del PSOE acusados de haber colaborado con soviéticos y comunistas durante la etapa de Negrín al frente del Ejecutivo republicano.

Pero hoy se ha completado esa rehabilitación con la entrega a todos ellos del carné de militante socialista a título póstumo y que ha sido recogido por los hijos, nietos y otros familiares de los expulsados hace más de sesenta años, entre ellos el escritor Max Aub.

En nombre de los familiares, Carmen Negrín, nieta del que fuera presidente del Gobierno republicano, ha lamentado la "leyenda negra" que ha tenido que padecer su abuelo, acusado de ser el responsable de enviar a Moscú gran parte de las reservas de oro de España.

Ante las críticas que durante años se le han dirigido de que su máxima de "resistir es vencer" hiciera que la Guerra Civil se hubiera prolongado más tiempo pese a que ya se sabía cuál iba a ser el final, ha recalcado que lo único que pretendió es luchar por su país y preservar la República de una dictadura que acabó llegando.

Para ella, su abuelo se convirtió en un "chivo expiatorio" y ahora ya es tiempo de saber qué pasó en realidad, por lo que ha considerado que el acto de hoy es un paso para la reconciliación.

Alfonso Guerra, presidente de la Fundación Pablo Iglesias, ha confesado su emoción ante lo vivido hoy en la sede federal del partido, que ha calificado de acto de reparación y de rectificación después de que la dirección del PSOE se equivocara en su día y cometiera una "injusticia".

Ha coincidido con la nieta de Negrín en que todos los expulsados sólo pretendían la defensa de la República y de España, y tras elogiar la trayectoria del que fuera presidente del Gobierno republicano, ha lamentado que los vencedores de la Guerra Civil aprovecharan para difamar y atribuirle la leyenda de que regaló el oro español a la Unión Soviética.

Guerra ha explicado que hoy en día se puede saber que esa guerra nunca la podían ganar los republicanos desde el momento en que las democracias occidentales "traicionaron" al Gobierno legítimo y acordaron no intervenir en la contienda.

Por su parte, la secretaria de Organización socialista ha subrayado que hoy el PSOE ha recuperado su historia para proyectarla hacia el presente y el futuro, y ha recalcado que los socialistas disponen de un partido fuerte que, en contra de lo que puede suceder en otras fuerzas políticas que protagonizan un "permanente viaje a no se sabe dónde", no teme mirar hacia atrás ni intentar borrar las huellas de su pasado.

Para ella, en el PSOE se mira al pasado sin odio ni rencor, con ánimo de que cicatricen las heridas, para extraer las lecciones pertinentes y para reconocer sus esfuerzos a personas como Negrín y todos los exiliados españoles.

Al hilo de ello, ha anunciado que la Fundación socialista Jaime Vera convocará un certamen literario con la denominación "Tu historia, nuestra historia" con el que se pretende homenajear a todos los socialistas y recuperar historias "reprimidas o calladas"

"Seguiremos apoyando a quienes quieren rescatar la verdad, a quienes rinden homenaje a los que defendieron la democracia, a quienes quieren buscar en las cunetas a quienes fueron fusilados injustamente", ha aseverado.

Negrín fue nombrado en 1937 presidente del Gobierno republicano y mantuvo total consonancia con Azaña sobre la organización de la guerra hasta el verano de 1938, cuando sus posturas se enfrentaron acerca de la prolongación de la misma.

A su término, partió al exilio en Francia, más tarde en Londres y, tras la II Guerra Mundial se trasladó a México, donde dimitió como presidente del Gobierno ante las Cortes en el exilio después de que su gobierno fuera duramente contestado. Expulsado del partido en 1946, Negrín falleció en París diez años después.

Mostrar comentarios