Londres, 12 mar.- El Reino Unido deportó el año pasado a 55 sirios, de los que doce eran menores de edad, aunque ninguno fue enviado de regreso a su país debido al conflicto civil, según informó hoy el Ministerio británico de Interior.
Casi todos eran solicitantes de asilo sujetos a la retirada "forzosa" del país por haber incumplido las leyes de inmigración británicas, de acuerdo con datos facilitados por Interior.
La mayoría fue enviado a otros países europeos, aunque el ministerio no quiso dar detalles de los destinos.
De los doce menores deportados había cinco niñas y cuatro niños con menos de 14 años, mientras que los otros tres -un varón y dos chicas- tienen entre 14 y 18 años, según Interior.
Una portavoz del ministerio defendió la política de inmigración y dijo que el Reino Unido está "orgulloso" de sus antecedentes a la hora de conceder asilo a quienes lo necesitan.
En concreto, la portavoz señaló, que en los doce últimos meses hasta finales de 2013, se concedió estatuto de refugiado a 1.100 sirios y aclaró que las personas son únicamente deportadas cuando es "seguro o razonable hacerlo".
Se estima que el conflicto civil en Siria ha causado la muerte hasta ahora de 140.000 personas y ha provocado el desplazamiento de 2,3 millones de sirios a países vecinos como Jordania, Líbano, Turquía, Egipto e Irak, según Naciones Unidas.
El pasado enero, el Gobierno británico confirmó sus planes para aceptar a cientos de refugiados sirios, sin aportar una cifra concreta ni una fecha, especialmente a los más vulnerables, como los enfermos o los que han sido víctimas de torturas o abusos sexuales.
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