El rey aboga por "medidas de seguridad no tradicionales" contra el yihadismo

    • Don Felipe afirma que las actuaciones policiales y militares "no son suficientes", aunque sean también necesarias.
    • El yihadismo es una realidad que exige "nuevas respuestas", según el monarca.
Don Felipe, durante su acto en Madrid
Don Felipe, durante su acto en Madrid

El rey abogó este martes por hacer frente al radicalismo violento que conduce a fenómenos como el terrorismo yihadista con "medidas de seguridad no tradicionales". Felipe VI ha indicado que se ha puesto de manifiesto que las actuaciones policiales y militares, aún siendo necesarias, no resultan "suficientes" ante este desafío.

El jefe del Estado se refirió a esta cuestión al inaugurar en la tarde de este martes en la capital, unas jornadas sobre el radicalismo violento organizadas por el Club de Madrid. En la apertura de este encuentro participaron, también, el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, y la alcaldesa madrileña, Manuel Carmena.

En su discurso, don Felipe se refirió a que en 2005 el Club de Madrid se reunió en la capital cuando había pasado un año de la masacre del 11-M, de la que dijo fueron unos atentados "deleznables y cobardes", que "sumieron a España y al mundo entero en un inmenso dolor".
Jóvenes, mujeres y familias

El monarca añadió que, en la actualidad, "nuevas formas de radicalización y extremismo trascienden las fronteras tradicionales, adquieren a veces base territorial y amenazan a nuestras sociedades socavando los derechos humanos y la democracia a nivel global". Destacó que esta realidad exige "nuevas respuestas también globales".

Apuntó, en este sentido, que en 2005 se aprobó la Agenda de Madrid, alguno de cuyos aspectos, según el jefe del Estado, adquiere plena vigencia en la actualidad.Según don Felipe, una conclusió válida para estos momentos es que "la acción policial y el uso de medios militares, siendo necesarios, no son suficientes" para "prevenir y afrontar plenamente los numerosos conflictos que están en la raíz del fenómeno terrorista".

Por este motivo, sostuvo que "se impone la necesidad de analizar y poner en práctica una estrategia que incorpore medidas de seguridad no tradicionales, acciones concertadas de política exterior y la incorporación de actores fundamentales en la prevención del radicalismo violento, como son los jóvenes, las mujeres, las familias y las comunidades humanas".

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