El rey Felipe VI ha hecho una encendida defensa de los valores éticos que están en la raíz de nuestra sociedad en su mensaje de Navidad, que nos obligan a todos sin excepciones “por encima de cualquier consideración, de la naturaleza que sea, incluso de las personas o familiares”. En plena polémica por los problemas de su padre, el Rey emérito, con la justicia, el monarca español ha querido dejar muy claro el compromiso que se marcó desde su proclamación, en 2014, con “los principios morales y éticos que los ciudadanos reclaman de nuestras conductas”. “Así lo he entendido siempre, en coherencia con mis convicciones, con la forma de entender mis responsabilidades como Jefe de Estado y con el espíritu renovador que inspira mi Reinado desde el primer día”.
En el discurso que más expectación ha generado de los últimos años, don Felipe se desmarca de las críticas que se han lanzado sobre la Corona desde algunos sectores políticos de la izquierda radical y ratifica su papel como Jefe del Estado en un momento en el que la unidad de España y el trabajo conjunto de toda la sociedad es una de las claves para superar la crisis sanitaria y salir del agujero económico que ha provocado. Aun así, destaca que en la base de ese proceso y junto a nuestros principios democráticos y el cumplimiento de las leyes “necesitamos también preservar los valores éticos” de nuestra sociedad.
Ante tanta incertidumbre por la pandemia y sus consecuencias, el Rey recuerda en su intervención ante todos los españoles la fortaleza del sistema de convivencia democrática que nos ha otorgado la Constitución, que “garantiza nuestro modo de entender la vida, nuestra visión de la sociedad y del ser humano”. Para no dejarse en el tintero los logros del pasado, señala además que “los avances y el progreso conseguidos en democracia son el resultado del reencuentro y el pacto entre los españoles después de un largo periodo de enfrentamientos y divisiones”.
El esfuerzo de muchas generaciones
Frente a quienes critican el modelo de monarquía constitucional, el monarca insiste en el espíritu integrador que instauró la Carta Magna, “en el respeto a la pluralidad y a las diferencias, y en la capacidad de dialogar y alcanzar acuerdos. Son principios que no pierden nunca vigencia con el paso de los años”. Es por ello que el discurso de este año 2020 repite la necesidad de respetar en todo momento la Constitución, porque “es el fundamento de nuestra convivencia social y política; y representa, en nuestra historia, un éxito de y para la democracia y la libertad”.
Felipe VI ha querido finalizar su intervención navideña con un mensaje optimista a pesar de todas las circunstancias que generan desánimo y causan dolor en la sociedad. Para ello, resalta la enorme riqueza y diversidad cultural de nuestro país, construido a lo largo de los siglos gracias al esfuerzo de muchas generaciones de españoles. “No somos un pueblo que se rinda o que se resigne en los malos tiempos. No va a ser nada fácil superar esta situación, y en cada casa lo sabéis bien. Pero yo estoy seguro de que vamos a salir adelante”, señala.
Tal y como hizo el día que llegó a la Corona y después de haber visitado junto a la Reina todos los rincones de España que han podido una vez que terminó el confinamiento, el monarca español reitera el discurso de este año su compromiso de estar al lado de todos los españoles “en los lugares de trabajo, en las aulas, en las plazas y en los barrios… en la vida cotidiana que da forma al carácter de una sociedad como la nuestra”, tanto porque es su deber, como por “convición”. "No será difícil que el año 2021 mejore a este 2020", admite.
