El Senado aprueba sin algunos puntos clave el proyecto de ley de inmigración

París.- El Senado francés aprobó hoy, sin alguno de sus puntos clave, el controvertido proyecto de ley sobre inmigración, que endurece la lucha contra los sin papeles y agiliza su expulsión, por lo que el texto deberá volver a la Asamblea Nacional para una nueva lectura.

La discusión se produjo en nueve días de intenso debate parlamentario en los que el ministro del Interior, Brice Hortefeux, ha subrayado que el texto persigue alcanzar una política migratoria "respetuosa de los derechos humanos, pero firme contra quienes no acatan las leyes" de la República.

Los senadores eliminaron la propuesta más controvertida, sobre la extensión de retirar la nacionalidad francesa -por el momento reservada a culpables de actos de terrorismo-, a los naturalizados hace menos de diez años que atenten contra las fuerzas del orden.

Asimismo, suprimieron, entre otros, el artículo que pretendía retrasar a cinco días la intervención de un juez en caso de detención, en lugar de las 48 horas actuales, rechazando con ello la reforma introducida por el Ejecutivo.

La ley debatida recoge los principales puntos del discurso sobre inmigración pronunciado el pasado julio por el presidente, Nicolas Sarkozy, que abrió la campaña de intensificación de las expulsiones de gitanos del país.

Facilita, además, la expulsión de ciudadanos comunitarios sin recursos propios, y, entre otros puntos polémicos, endurece las medidas contra quienes vuelvan a Francia tras haber sido expulsados.

Entre las reformas del Senado se incluyó hoy la supresión de la que pretendía suprimir la posibilidad de que extranjeros enfermos, especialmente aquellos afectados por alguna afección grave, obtuvieran el permiso de estancia durante el tiempo necesario para su tratamiento.

Debido a la falta de acuerdo entre la Asamblea Nacional, el proyecto de ley volverá de nuevo a la Asamblea para su aprobación final, y en el caso de que ésta introduzca alguna modificación, se lo entregará de nuevo al Senado para una segunda lectura.

De seguir las modificaciones por parte de esa cámara, se designará una comisión mixta formada por siete senadores y siete diputados, quienes serán los encargados de elaborar el texto definitivo sobre la base de los puntos comunes acordados hasta la fecha, indicaron a Efe fuentes del Senado.