La elección directa de alcaldes de PP y Ciudadanos acabaría con las alcaldías del cambio

  • El pacto entre el Partido Popular y Ciudadanos recoge "la elección directa de los alcaldes", por lo que sería el partido más votado el que gobernase.

    Esta medida, que el PP ya propuso en 2014, significaría que los populares podrían haber gobernado en algunas capitales como Madrid o Valencia, donde los pactos evitaron sus alcaldías.

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Luis Díaz

El pacto entre Partido Popular y Ciudadanos podría quedar en papel mojado si Mariano Rajoy no consigue los seis votos necesarios o la abstención socialista para desencallar la formación de Gobierno. En caso de lo que sería una sorprendente investidura, más allá de las medidas económicas y sociales, entre las 150 medidas fijadas entre ambos partidos una cambiaría drásticamente el sistema electoral español: la elección directa de los alcaldes.

El punto 97, dentro del tercer bloque, el que trata sobre transparencia, regeneración democrática y lucha contra la corrupción, se especifica que el acuerdo busca "la mejora de la proporcionalidad, la elección directa de los alcaldes, el desbloqueo de las listas electorales, la implantación de sistemas electrónicos de votación, la mejora de los procedimientos del ejercicio del derecho al voto de los ciudadanos residentes en el extranjero, la reducción de la duración de las campañas y los límites de los gastos electorales".

Esta "elección directa de los alcaldes" se nombra solo de soslayo, sin entrar en detalles de como sería dicha reforma. Pero en el mismo punto se subraya que "El Partido Popular se reserva la posibilidad de presentar iniciativas que permitan garantizar el Gobierno de la fuerza más votada". Esto lleva a pensar que esta medida es fruto del equipo negociador del PP y que Ciudadanos ha tenido que claudicar en este punto para que se acepten algunas de sus propuestas. Más teniendo en cuenta que gracias a este cambio el bipartidismo se ve reforzado, algo que la formación naranja ha tratado de evitar desde su salto al tablero nacional.

La medida no es nueva, ya que en 2014 -tras las elecciones europeas en las que irrumpió Podemos- el Partido Popular ya propuso realizar esta reforma para las elecciones municipales y autonómicas de mayo de 2015. La oposición del resto de partidos evitó que saliese adelante dicha reforma, aunque la mayoría absoluta con la que contaba en PP por entonces era suficiente para llevarla a cabo. Aunque cambiar las reglas del juego a pocos meses de las elecciones no era muy justo.

Esta elección de los alcaldes beneficiaría al PP, ya que fue el partido más votado y el que mayor número de concejales consiguió. Con esta reforma se aseguraría no perder alcaldías como las de las principales capitales, algo que ocurrió en 2015 en Madrid o Valencia. Se desconoce como sería dicha reforma, ya que no especifica si la alcaldía se lograría con una sola vuelta o sería necesaria la segunda ente los más votados. Tampoco si es necesario un porcentaje mínimo para lograr la alcaldía de forma directa y dejar atrás la ley d'Hont.Las alcaldías del cambio no hubiesen existido

Lo único que se conoce sobre esta elección directa es la intención de ponerla en marcha, porque sobre "la posibilidad de presentar iniciativas que permitan garantizar el Gobierno de la fuerza más votada", tampoco se desarrolla que tipo de iniciativas serían o en que tipo de situaciones serían aplicables.

El primero en posicionarse a favor de este cambio ha sido Xavier García Albiol, ex alcalde de Badalona y actual presidente del grupo parlamentario del PP en el Parlament. Albiol ha puesto "Un 10 a la propuesta" del PP y Cidadanos en la que se habla de la "elección directa por los vecinos del alcalde". Sentenciando su apoyo incondicional con un "Adiós a las alcaldesas que nadie ha votado".Un 10 a la propuesta pacto @PPopular y @CiudadanosCs de elección directa x los vecinos del Alcalde. Adiós a las alcaldesas q nadie ha votado— Xavier García Albiol (@Albiol_XG) 28 de agosto de 2016

La alcaldía de Albiol se extendió de 2011 a 2015, cuando en las últimas elecciones municipales un pacto enter en Comú, PSC, ERC e ICV-EUiA significó la alcaldía para Dolors Sabater. Aunque la última parte del tuit va claramente dirigida para Manuela Carmena, ya que Ada Colau sí gano las elecciones en Barcelona, siendo Barcelona en Comú la fuerza más votada.

Si esta reforma hubiese estado vigente en 2015 las conocidas como alcaldías del cambio no habrían tenido lugar. Por ejemplo, en Madrid fue Esperanza Aguirre la más votada -un 34,55% de los votos por el 31,85% de Ahora Madrid- pero gracias al apoyo de los socialistas Manuela Carmena pudo lograr la alcaldía. Algo similar ocurrió en Valencia, donde otra vieja gloria del PP, Rita Barberá, tuvo que ceder la vara de mando a Joan Ribó, de Compromís.

El bipartidismo se vio alterado gracias a la actual ley electoral, y capitales como Zaragoza, Cádiz o Sevilla también gestaron sus alcaldías gracias a los pactos propios de un sistema parlamentario, algo que podría acabarse si el PP forma un ejecutivo y consigue cambiar el método de elección de los alcaldes. Aunque el resto de partidos del hemiciclo no verían con buenos ojos dicha reforma, y salvo Ciudadanos -que se ha suscrito al pacto- es difícil que el resto de fuerzas sean favorables a este cambio.

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