El tiempo se acaba y las horas pasan volando. A poco menos de un mes de que España pueda volver a la normalidad, falta un último periodo de estado de alarma que garantice el control absoluto de la situación al Gobierno central. Y para ello, el Congreso debe validar la última propuesta. A falta de que el propio Ejecutivo de Pedro Sánchez lo proponga, ERC mantiene "conversaciones abiertas" con Moncloa sobre la sexta prórroga del estado de alarma por el coronavirus, que se votaría este miércoles en el Congreso. Tras adelantar 'La Vanguardia' que se había cerrado un pacto ya con Moncloa, la formación catalana ha especificado que, de momento, se sigue trabajando en ello.
A la vista de estas conversaciones, el partido "ha decidido reunir de urgencia la Permanente Nacional" este sábado por la tarde, han explicado fuentes republicanas a Ep. ERC votó en contra de la prórroga en la última votación y criticó que el Gobierno cerrara un pacto con Cs para sacarla adelante en vez de dar respuesta a sus peticiones, que incluían el retorno de las competencias centralizadas con la alarma y un calendario para la mesa de diálogo.
Precisamente, la formación naranja ha sido de las pocos grupos que más dispuestos parecen a negociar con el Gobierno junto al PNV. Sin embargo, y como ocurriera la última vez, el Gobierno necesita sumar apoyos desde distintos frentes para garantizar, al menos, que la propuesta no sale con más votos en contra que positivos. Las abstenciones también tienen mucho que decir en esta negociación. De hecho, los contactos entre socialistas y republicanos se concentran en una supuesta abstención por parte de los segundos. Con este voto más el sí de los nacionalistas vascos, Sánchez no precisaría de Ciudadanos (ni tampoco de Bildu).
A todo esto, el presidente de la Generalitat de Cataluña, Quim Torra, ha avisado este sábado de que se volverá a oponer a la prórroga del estado de alarma si no se retornan a la Administración catalana las competencias que están actualmente bajo el mando del Gobierno central.
Volviendo a ERC, lo que sí parece claro es que su abstención tampoco será gratuita en cuanto a contraprestaciones políticas. Al igual que ha ocurrido con el PNV con sus anteriores apoyos, los republicanos pretenden recuperar algunas potestades en cuanto a competencias regionales en esta última etapa de la desescalada así como en los primeros meses de la normalidad posterior.
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