Madrid, 28 ene.- El Gobierno ha advertido hoy de la "peligrosa y preocupante" deriva de la situación en Egipto y ha confiado en que se restaure el orden público y se adopten las medidas necesarias para restablecer la confianza ciudadana "en la conducción de un proceso genuinamente democrático" en el país.
En un comunicado, el Ministerio de Asuntos Exteriores lamenta "los trágicos acontecimientos de estos días" que han costado la vida a varias personas y han dejado hasta la fecha un balance de cientos de heridos.
"Se trata de una deriva peligrosa y preocupante, en un momento en que se conmemora el segundo aniversario de la revolución, que abrió un periodo de grandes esperanzas para el conjunto de la población egipcia", afirma la nota.
El presidente egipcio, Mohamed Mursi, ordenó ayer el toque de queda y el estado de emergencia en varias ciudades del país para intentar frenar la violencia, que este fin de semana ha causado docenas de muertos.
El Gobierno ha reiterado su apoyo a las autoridades y el pueblo egipcios "en estos momentos difíciles del proceso de transición política".
Asimismo, ha confiado en que "a la vez" que se restaura "el imprescindible orden público", se adopten las decisiones "que ayuden a restablecer la confianza ciudadana en la conducción de un proceso genuinamente democrático, sobre la base del consenso sobre las cuestiones fundamentales y el respeto a las diferentes sensibilidades, así como a los derechos y libertades de todos".
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