España supedita las relaciones con Honduras a que Lobo cumpla su palabra

Madrid.- España supeditó hoy la normalización de las relaciones con Honduras al cumplimiento de los compromisos asumidos por Porfirio Lobo, que en las próximas horas tomará posesión como presidente de Honduras.

El secretario de Estado español para Iberoamérica, Juan Pablo de Laiglesia, indicó hoy, en un encuentro con periodistas, que en Honduras existe "una situación de anormalidad que habrá que corregir".

Y recordó que cuando se produzca la toma de posesión de Porfirio Lobo "todavía va a estar el presidente constitucional (Manuel Zelaya) confinado en la embajada de Brasil".

Lobo se ha comprometido, dijo, a que después de asumir el cargo proporcionará un salvaconducto que facilite la salida a Santo Domingo de Zelaya, quien fue derrocado en junio pasado y está refugiado en la legación brasileña desde hace varios meses tras regresar clandestinamente al país.

"A partir de ahí -subrayó el secretario de Estado español- y con el cumplimiento de los compromisos que Porfirio Lobo ha asumido se producirá la normalización plena de relaciones y el regreso de los embajadores", en alusión tanto a los representantes de la UE como de países latinoamericanos.

Porfirio Lobo ganó con claridad en noviembre pasado unas elecciones a las que dio la espalda la mayor parte de la comunidad internacional.

Preguntado sobre si Manuel Zelaya ha solicitado asilo en España, de Laiglesia negó que hubiera formulado dicha petición "en ningún sentido" y recordó que el depuesto presidente está de acuerdo en viajar a Santo Domingo para luego trasladarse a un tercer país.

Y, según de Laiglesia, Zelaya piensa "más en un país latinoamericano que en uno europeo".

De Laiglesia concretó que España estará presente en la ceremonia de toma de posesión de Lobo con la presencia del encargado de negocios de la Embajada, Alberto Miranda de la Peña.

Será el único representante oficial de España, después de que el Gobierno español haya decidido que no acuda el Príncipe de Asturias, heredero de la Corona, ni ningún alto cargo del ministerio de Exteriores en protesta por el derrocamiento de Manuel Zelaya el pasado 28 de junio.