Espionaje eeuu. El gobierno separa las relaciones económicas del problema de las escuchas


La vicepresidenta y portavoz del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, sugirió este jueves que las relaciones económicas y comerciales entre España y Estados Unidos deben estar por encima del problema diplomático que ha surgido a raíz de las escuchas que la agencia norteamericana NSA ha llevado a cabo en los últimos años en la Unión Europea.
Durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Sáenz de Santamaría pidió ser “muy conscientes de las iniciativas de un mundo global” y se mostró partidaria de “preservar en la medida” posible el acuerdo de libre comercio entre Estados Unidos y la Unión Europea, que ahora está pendiente de negociación.
Sáenz de Santamaría señaló que las conversaciones sobre ese acuerdo requieren “un proceso de decisión muy largo” y por lo tanto es necesario “seguir trabajando” en ello, al margen del enojo que en los países europeos ha causado la publicación de documentos oficiales que prueban que Estados Unidos lleva años espiando a sus socios europeos.
La vicepresidenta no quiso confirmar pero tampoco desmentir ante los periodistas que el espionaje de EEUU a líderes europeos incluyera al presidente español, Mariano Rajoy, y apuntó que todas las explicaciones correspondientes las dará el director del Centro Nacional de Inteligencia, Félix Sanz Roldán, el próximo miércoles a las 9 de la mañana cuando comparezca ante la Comisión de Secretos Oficiales del Congreso de los Diputados.
Sáenz de Santamaría señaló que ese es un “ámbito discreto y secreto” donde puede informarse mejor de lo ocurrido a los portavoces parlamentarios, sin perjuicio de las explicaciones que ya se han reclamado al embajador de Estados Unidos en España y sobre las que el Gobierno está “a la espera”.
Indicó que el Ejecutivo quiere ser “prudente” sobre esta polémica pero reconoció que si se confirmara que EEUU espió a líderes europeos que son socios y amigos afectaría a la “confianza mutua que se tiene entre países y estados”.
Finalmente, la vicepresidenta rechazó cualquier comparación entre las explicaciones públicas que EEUU está aportando sobre esta materia y las que los servicios secretos españoles van a dar a puerta cerrada en el Congreso, al considerar el funcionamiento de ambos estados “no son comparables”.

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