Ex jefe de Estado del Jemer Rojo declara su inocencia en alegato final

Bangkok, 31 oct.- Khieu Samphan, jefe de Estado durante el régimen del Jemer Rojo en Camboya, se declaró hoy inocente de genocidio y crímenes contra la Humanidad, entre otras acusaciones, durante su alegato final ante el Tribunal Internacional que lo juzga.

"Yo nunca quise o decidí la evacuación de poblaciones ni tampoco planeé o decidí la masacre de gente inocente (...) Nunca participé en los planes que después hicieron sufrir a la gente. Nunca, nunca fui parte de esos planes", declaró Samphan, de 82 años.

En su declaración, que duró cerca de media hora, el expolítico se amparó en el rol institucional que ocupaba para rechazar los crímenes que le imputa el tribunal internacional de Camboya por la muerte de 1,7 millones de personas entre 1975 y 1979, que hoy quedará visto para sentencia.

"Hoy es fácil decir que yo debí entender lo que sucedía e intervenir para cambiar la situación (...) ¿De verdad pensáis que eso era lo que quería que pasara a mi gente?", indicó Samphan que a diferencia de su compañero en el banquillo de los acusados, Nuon Chea, admite las atrocidades del régimen, pero mantiene que él no tuvo culpa porque su cargo era simbólico.

"Mi conciencia y convicciones políticas en aquel tiempo eran proteger al débil para construir una Camboya fuerte, independiente, próspera y en paz", señaló Samphan ante la petición de cadena perpetua por parte de la fiscalía.

Pese a que en 1976 fuera nombrado jefe de Estado por Pol Pot no es hasta la caída del régimen cuando se convierte en la cabeza visible del Jemer Rojo, primero en el Gobierno de Coalición de Kampuchea Democrática en el exilio y después en 1985, al sustituir de secretario general del Partido Comunista de Kampuchea a Pol Pot, aunque este retuviese el poder real.

Samphan, también llevó la misión del Jemer Rojo que participó en el proceso de reconciliación auspiciado por la ONU, del que nació el Acuerdo de Paz de París en 1991, pero que terminó con la vuelta a las armas y el boicot a las elecciones democráticas de 1993.

Tras la muerte de Pol Pot en 1998, negocia la desmovilización del Jemer Rojo y se retira a su casa en Pailin hasta 2007, cuando es detenido por el tribunal internacional creado en Camboya para juzgar el genocidio.

Previo al alegato de Samphan, el ideólogo y número dos del Jemer Rojo, Nuon Chea, de 87 años, también se declaró hoy inocente de los cargos presentados en su contra.

El ideólogo del Jemer Rojo pidió al tribunal que lo liberara inmediatamente y afirmó que no había recibido un "proceso justo" durante el juicio.

Unos 1,7 millones de camboyanos, según el programa del genocidio de la universidad estadounidense de Yale, perdieron la vida en las purgas y deportaciones masivas al campo que se llevaron a cabo en condiciones infrahumanas para instaurar un régimen socialista rural de orientación maoísta.

El jefe del Jemer Rojo, Pol Pot, murió en la selva camboyana en 1998, prisionero de sus propios correligionarios.