¿Exhumación de Franco? Lo que queda a su nombre y han heredado sus nietos

  • Varios de los inmuebles que han recibido los siete hijos de Carmen Franco Polo tienen todavía como titular a Francisco Franco Bahamonde.
Palacio Cornide, en Coruña
Palacio Cornide, en Coruña
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Franco y sus herederos están más presentes que nunca en la agenda política. Y no solo porque el Consejo de Ministros dará luz verde este viernes a la exhumación de los restos de Franco, sino porque la sombra de unas elecciones generales anticipadas podría cercenar uno de los grandes hitos de la agenda de Pedro Sánchez. Además, la semana pasada el Concello de Santiago perdió la batalla judicial en la que reclamaba la propiedad de las estatuas de Abraham e Isaac que el maestro Mateo esculpió para el pórtico de la Gloria de la catedral. Sus legítimos dueños, según la magistrada del juzgado de primera instancia número 41 de Madrid, son los herederos de la familia Franco.

Las estatuas de Abraham y Mateo figuran en el caudal hereditario de María del Carmen Franco y Polo, duquesa de Franco e hija única del general y dictador español Francisco Franco y de su esposa María del Carmen Polo, que falleció en diciembre de 2018. En el testamento de la duquesa de Franco se les da un valor nominal de 90.000 euros cada una, según aseguran fuentes conocedoras de ese documento. 

De Coruña a La Granja

En el testamento figura un largo rosario de bienes y fincas solariegas (casi 200) y algunos están aún al nombre del dictador. La razón es que el Registro de la Propiedad, a pesar de su fuerza legal, es potestativo. No es obligatorio cambiar la titularidad del inmueble en el registro, ya que este es voluntario. Por tanto, son los herederos quienes deciden si quieren o no asumir el gasto de inscribirlo a su nombre. Y se ve que ninguno de los siete nietos del dictador (María del Carmen, María del Mar, María de la O, María Arantzazu, Francisco, Jaime y José Cristóbal) ni su propia madre tuvieron necesidad de hacerlo en algunos casos.

Es el caso del palacio de Cornide, en Coruña, un palacete de 800 metros decimonónico, situado en la zona vieja de la ciudad valorado en la herencia en 4,9 millones de euros y que fue de utilidad pública al albergar el consistorio municipal. El lugar, que fue el gran capricho de la mujer del dictador, sigue a nombre de Carmen Polo Martínez Valdés y su esposo Francisco Franco Bahamonde, titulares de pleno dominio con carácter presuntivamente ganancial. Todo según lo estipula el Registro de la Propiedad.

Otro inmueble que sigue a nombre del dictador es la casa que la familia tiene en El Ferrol situada en el número 136 de la Rúa María. Allí aún se exhibe una placa descubierta por la duquesa de Franco en 1987 que informa de que en esa vivienda nació "el caudillo de España y generalísimo de los ejércitos". El mismo patrón sigue la casa que la familia tiene en La Granja, Segovia. Situada en la calle Reina 7 y que siempre ha sido el lugar de veraneo de los actuales herederos del dictador.

Casa natal de Franco en Ferrol
Casa natal de Franco en Ferrol / Google Maps

En el documento hereditario figura también el emblemático Pazo de Meirás, en la localidad coruñesa de Sada, según explican las fuentes que lo conocen. El lugar está a nombre de Carmen Polo Martínez Valdés. En herencia se le dio un valor inferior a siete millones y que sigue a la venta por ocho en la inmobiliaria cántabra Mikeli, cuyo propietario Antonio Avilés, ya realizó la transacción de la casa de Santander de Cármen Martínez-Bordiú.

Los inmuebles clasificados 

Algunas de las propiedades que se contemplan en la herencia tienen sus datos registrales protegidos y es muy complicado acceder a la titularidad. Es lo que ocurre con la propiedad que la familia tiene (o tenía) en Asturias. La Piniella, la finca asturiana de la familia Franco, se puso a la venta dos meses después de la muerte de la matriarca del clan, Carmen Franco Polo. Se trataba de 50 hectáreas situadas en la localidad de San Cucao (Llanera). Este medio se ha puesto en contacto sin éxito con la inmobiliaria Mikeli para confirmar la venta, ya que la propiedad ha sido retirada de la página web, donde compartía 'scroll' con el pazo de Meirás. 

Finca de Franco en Asturias
Finca de Franco en Asturias / Mikeli

Con el cuartel general de Hermanos Bécquer no hay problema de titularidad ni con las casas en la madrileña calle Concha Espina. Todas están a nombre de Sargo Consulting. Una nómina de propiedades, en su mayoría fincas rústicas, que decrece mes a mes ya que la intención de la familia es conseguir liquidez y repartir, de una vez, la polémica herencia de la que ya solo quedan sus bastiones más emblemáticos, según explican las fuentes consultadas cercanas a ese proceso.

Todo con permiso de la finca de Valdelasfuentes, en Arroyomolinos, en cuyos terrenos se ubica el centro comercial Xanadú y que es hasta la fecha el pelotazo inmobiliario más jugoso de la familia y el que más alegrías urbanísticas les ha dado. 

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