Expresidente uruguayo Sanguinetti dice que rey legitimó monarquía en España

Montevideo, 2 jun.- El rey Juan Carlos I logró "darle legitimidad a la monarquía española" y fue "sin duda un factor de estabilidad para su país" en el mantenimiento de la democracia, apuntó el dos veces presidente de Uruguay Julio María Sanguinetti al valorar la figura del monarca que hoy anunció su abdicación.

El exmandatario, el primero elegido democráticamente en el país tras la dictadura militar que gobernó en Uruguay entre 1973 y 1985, valoró a Juan Carlos I como "una figura incorporada en la historia de España y de América Latina".

"Y en América Latina particularmente, porque tuvimos mucho su presencia, con la que logró superar la distancia que el franquismo estableció entre España y nosotros", afirmó.

Sanguinetti recordó el apoyo que el rey español brindó a la incipiente democracia uruguaya durante una visita en 1984, en pleno período dictatorial.

"Juan Carlos llegó al país en un momento en el que negociábamos la salida de la dictadura y ofreció una recepción en la embajada de España en Montevideo a la que invitó a los políticos que estábamos proscritos, lo que significó un voto de aliento extraordinario al proceso de transición", recordó Sanguinetti.

En cuanto al heredero de la Corona, el príncipe Felipe, el expresidente uruguayo (1985-1990 y 1995-2000) apuntó que es una persona muy cercana al continente americano y que estuvo presente "en todos los cambios de mando en América Latina".

"Es un hombre formado, educado, formal y abierto y que creo que le abre una gran puerta de esperanza a la monarquía española", añadió.

El rey Juan Carlos I (Roma, 1938) anunció hoy que abdica en su hijo el príncipe Felipe para dar paso a "una nueva etapa de esperanza", tras un reinado de 39 años.

El monarca anunció su decisión en un mensaje dirigido a los españoles, emitido por radio y televisión, en el que se mostró cercano y en el que afirmó sentirse orgulloso de los españoles por los logros conseguidos y les expresó su gratitud por el apoyo que le ofrecieron.

Con su renuncia, el rey dijo que quiere "abrir una nueva etapa de esperanza en la que se combinen la experiencia adquirida y el impulso de una nueva generación".