F. Díaz rechaza legislar a golpe de telediario en Ley de Seguridad Ciudadana

Madrid, 17 dic.- El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha señalado hoy que la reforma de la Ley de Seguridad Ciudadana no es una iniciativa que surja de legislar "a golpe de telediario", sino que da respuesta a actuaciones que generan "mucho peligro" y que no se producían cuando se redactó la ley en 1992.

En respuesta a una interpelación del senador del PSOE Enrique Cascallana acerca de la reforma de la Ley de Seguridad Ciudadana y sobre la política que el Gobierno está desarrollando en este ámbito, Fernández Díaz ha rechazado que la ley trate de silenciar las protestas sociales, tal y como ha denunciado el senador socialista.

El responsable de Interior ha aludido a una declaración de marzo de 2012 en el Congreso sobre su intención de reformar la Ley Orgánica de la Protección de la Seguridad Ciudadana para defender que esta iniciativa "no surge de legislar a golpe de telediario, sino que está anunciada a comienzo de la legislatura".

Para Fernández Díaz, la reforma trata de dar respuesta a actuaciones que no se producían cuando se redactó la ley vigente en 1992 y "que generan mucho peligro" como, ha citado, apuntar con un láser a pilotos de aviones y conductores de autobuses como demuestran las más de 350 acciones de este tipo que se han producido este año.

Es asimismo la ley "que respeta el derecho de quienes se manifiestan y que al mismo tiempo respeta la libertad de quienes no lo hacen", ha defendido el ministro, que rechazado que la norma restrinja el derecho de reunión o de manifestación.

Junto a nuevas formas de vandalismo, Fernández Díaz ha justificado la "necesidad" de reformar la ley por dos factores: Incorporar la jurisprudencia del Tribunal Constitucional y del Supremo de los últimos veinte años sobre este asunto, y por la salida de las faltas del Código Penal.

Sobre este último punto, ha señalado que una infracción administrativa "es menor rigurosa que una infracción penal" y que la la imposición de sanciones está "rodeada de garantías constitucionales".

El anteproyecto de ley guarda un "exquisito respeto" a los derechos y libertades de los ciudadanos, ha aseverado el ministro.

En la defensa de la interpelación, el senador socialista ha denunciado que la ley genera "alarma social" porque no responde a las preocupaciones de los españoles sino que solo pretende "amordazar" a la sociedad ante "la creciente ola de protestas".

En su opinión, esta cuestión "no se resuelve blindando instituciones democráticas como el Congreso y el Senado sino abriéndolas a los ciudadanos".

"¿Es que ahora no estaban protegidas las instituciones del vandalismo?, ha preguntado Cascallana, quien ha agregado que el Gobierno "ha pasado de ser apoyado por una mayoría silenciosa a desear una mayoría silenciada".

Por todo ello, ha pedido la retirada del anteproyecto de ley que pretende utilizarse como "una anestesia ante las protestas que acosan al Gobierno".