Faisán. La audiencia rechaza levantar las medidas cautelares contra el inspector ballesteros

La Sección Segunda de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional ha rechazado levantar las medidas cautelares impuestas al inspector José María Ballesteros, uno de los tres mandos policiales imputados por el chivatazo del “caso Faisán”, con el que se alertó a ETA el 4 de mayo de 2006 de la operación antiterrorista que se iba a llevar a cabo contra su aparato de extorsión.
El instructor de la causa, el juez Pablo Ruz, dejó a Ballesteros en libertad provisional pero le impuso la obligación de comparecer los días 1 y 15 de cada mes ante los juzgados de instrucción más próximos a su domicilio.
La defensa del inspector recurrió esta medida alegando que es un funcionario de la Policía Nacional actualmente en servicio, que tiene “familia y domicilio conocido” y que, por lo tanto, no tiene intención de sustraerse a la acción de la justicia.
Los magistrados de la Sección Segunda de lo Penal, presididos por Fernando García Nicolás, han decidido desestimar el recurso de apelación interpuesto por Ballesteros al concluir que las medidas cautelares que le impuso el juez Ruz están respaldadas por la legislación, según consta en un auto de este tribunal hecho público hoy.
En la causa, además del inspector Ballesteros, se encuentran imputados por delitos de colaboración con ETA y revelación de secretos el que fuera director general de la Policía Nacional Víctor García Hidalgo y el jefe superior de Policía del País Vasco, Enrique Pamies.
Ballesteros está acusado de ser la persona que le entregó al dueño del bar “Faisán” de Irún (Guipúzcoa), Joseba Elosua, supuesto enlace del aparato de extorsión de ETA, un teléfono móvil con el que se le alertó de la operación antiterrorista que iba a llevarse a cabo.