Feijoó reclama medidas y no calcular cuándo España estará como Grecia

Santiago de Compostela.- El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, insistió hoy en que España "no es Grecia pero va a tener que trabajar mucho" para no llegar a su situación, por lo que consideró que "lo importante es tomar medidas" y "no decir cuánto tiempo vamos a tardar en estar como Grecia".

Núñez Feijóo abordó la situación económica de España en una entrevista en TVE, recogida por Efe, en la que también se refirió a la salud de Don Juan Carlos para celebrar que "tenemos un Rey muy potente" que "ha pasado muchas vicisitudes" pero mantiene "su fortaleza física intacta".

Durante su intervención en el plano económico, abogó por tomar lo ocurrido en Grecia "como un aviso" porque el déficit público y el desempleo en España han iniciado "una senda preocupante".

Descartó cualquier tipo de contradicción en este sentido con la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, que ayer manifestó que "nos puede pasar lo que les ha pasado a los griegos, nos puede pasar si no se toman las medidas necesarias".

"Hoy España no es Grecia pero tenemos que trabajar mucho para que no lo sea mañana", reiteró el presidente de la Xunta y del PPdeG, quien vinculó la evolución de la Bolsa a hacer "los deberes" y enviar un "mensaje de confianza" a los mercados pues, tanto el déficit público como el desempleo pueden crear un "caldo de cultivo" para los especuladores.

En todo caso, subrayó que España es "un país fuerte" que ha de "tomar en serio de verdad" que la tasa de paro que mantiene es "inadmisible" y que hay que reducir el déficit público, y "tomarse en serio los recortes es hacerlo, no anunciarlo", precisó.

De momento, continuó, no se han previsto más que medidas para disminuir el déficit en 2.500 millones en las Comunidades autónomas y "manteniendo la legislación intacta esto es muy difícil", agregó Núñez Feijóo, quien propuso debatir en el Senado la congelación del sueldo de los funcionarios e incluso su reducción.

La congelación salarial es una competencia básica del Estado, explicó el presidente de la Xunta, quien enfatizó que ya propuso congelar el sueldo de los funcionarios, como en 1997, y que en 2010 esta medida "no es que fuese opinable, era obligado".

Aludió a otros países que no sólo lo congelaron sino que lo están rebajando, como Portugal o Irlanda, por lo que reiteró que "reducir me parece obvio, y el resto hemos de hablarlo entre todos", pues los empleados públicos entenderían que su aportación a la crisis pasaría por la congelación del sueldo y "otras masas salariales", agregó.

En opinión del jefe del Ejecutivo autonómico gallego, corresponde al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, "abandonar la Moncloa cuando quiera", si bien consideró que tras la Presidencia española de la Unión debería "hacer una reflexión pública" para decidir si cuenta con facultades para "sacar el país adelante" o si se siente "cansado y desanimado" para conseguirlo.

"Si prefiere que se desgaste el país o se desgaste él", insistió.

En este sentido, destacó del PP que es "la única alternativa frente a la crisis económica" pero aclaró que "en vez de enzarzarnos en posibles mociones de censura" lo que corresponde al PP es "comprometerse en una política distinta" para convencer a los ciudadanos de su alternativa económica.

En todo caso, dijo que Rodríguez Zapatero "debería haber entendido el mensaje" de los resultados de las elecciones gallegas y europeas y "tomar nota" porque en ambas "mociones de censura" le pidieron que cambiase su política económica y laboral.

Rechazó las críticas al PP de que se opone a todo, como al pacto por la educación, precisó, y aseveró que este planteamiento "ya no cuela" porque, entre otras razones, mencionó que "es muy difícil" pactar con "alguien que no está dispuesto a rectificar nada".