La Fiscalía General de Schleswig-Holstein ha solicitado la entrega del ex presidente catalán Carles Puigdemont a España ante el Tribunal Regional Superior de esa región del norte de Alemania por los cargos de rebelión y alteración del orden público.
El expresidente catalán fue capturado a finales del pasado mes de marzo mientras volvía en coche desde Helsinki, donde había dado una conferencia. El juez del Tribunal Supremo, Pablo Llarena, informó la pasada semana por carta al fiscal del tribunal alemán que debe resolver la entrega del expresident Carles Puigdemont de que la euroorden de detención cursada contra él reúne todos los requisitos formales y no deben caer en el mismo error que Bélgica. Llarena quería de esta forma que no se produjera la misma situación que había provocado la justicia belga con los otros exconsellers fugados en el país europeo, cuya euroorden fue rechazada por un defecto de forma.
La petición de la Fiscalía alemana se produce un día después de que el presidente Torra visitara a los exconsellers que se encuentran en las prisiones de Estremera, Soto del Real y Alcalá-Meco. Torra pidió que se produjera la excarcelación de "sus políticos" y declaró que en ningún país europeo "estarían en prisión".
El abogado de Carles Puigdemont, Jaume Alonso-Cuevillas, expresó su esperanza de que el Tribunal de Schleswig-Holstein rechace la petición de extradición del expresidente de la Generalitat, como hizo la justicia belga con los exconsellers.
En una publicación en Twitter ha asegurado que es habitual que la Fiscalía "asuma la posición del Estado" que emite una euroorden, pero que es el Tribunal quien debe tomar la decisión y espera que haga como la justicia de Bélgica, que denegó la extradición de los exconsellers Toni Comín, Lluís Puig y Meritxell Serret.
"¡Calma! Que la Fiscalía asuma la posición del Estado requirente es lo habitual. La Fiscalía pide y el Tribunal decide. Ahora iniciaremos procedimiento contradictorio, igual que pasó en Bélgica. Y esperamos que con resultados similares", ha manifestado, ya que la justicia belga rechazó la euroorden de los exconsellers por un defecto de forma de la euroorden, que es la misma que afecta a Puigdemont.
Por otro lado, en declaraciones a RAC 1, Torra ha recordado que la toma de posesión de los consellers nombrados -entre ellos, Jordi Turull y Josep Rull, en prisión preventiva, además de Antoni Comín y Lluís Puig, huidos a Bélgica-, está "prevista para mañana" (miércoles), por lo que espera que el Gobierno responda hoy mismo diciendo "exactamente qué considera incorrecto de este decreto de nombramiento".
El nuevo presidente catalán remarcó su disposición a abrir una fase de diálogo con la oposición en Cataluña y con el Gobierno de Mariano Rajoy, que puede representar a su juicio el "inicio de la desescalada" en el conflicto catalán. Torra ha asegurado que, por ahora, no ha tenido con Rajoy "ningún tipo de contacto", aunque espera poder reunirse con él en breve, y ha recalcado que "hasta que no se levante" la aplicación del artículo 155 de la Constitución no considerará como "interlocutor válido" a Enric Millo, delegado del Gobierno en Cataluña.
En esa misma entrevista, Torra avanzó que a su "primera recepción oficial" tiene previsto invitar a la jefa de la oposición y líder de Ciudadanos en Cataluña, Inés Arrimadas, y ha pedido al secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, que se disculpe por sus "insultos terribles".
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