Madrid, 21 feb.- La Fiscalía ha retirado su acusación contra Artzai Santesteban Arizcuren, para el que pedía siete años de prisión por la quema de dos cajeros en Pamplona en 2008, al considerar que durante el juicio celebrado hoy en la Audiencia Nacional no se ha podido probar su participación en los hechos.
El fiscal Jesús Santos ha señalado en su informe de conclusiones definitivas que no se puede desvirtuar la presunción de inocencia del procesado, ya que la única prueba de cargo que había contra él es la declaración inculpatoria de otro de los miembros de la organización juvenil ilegalizada Segi condenado por estos hechos.
Asimismo, el fiscal ha señalado que Iker Araguas Jusue, condenado a cuatro años y medio de prisión por estos incidentes, ha reconocido ante el tribunal que la declaración que realizó en dependencias policiales que incriminaba a Santesteban Arizcuren -única prueba existente contra el procesado- la realizó "totalmente" obligado bajo malos tratos y torturas.
"La declaración que hice es falsa y fue inducida mediante maltrato, como relaté al médico forense al que le indiqué, que en los días que estuve incomunicado, me hicieron la bolsa", ha concluido Araguas.
Durante la vista oral celebrada ante la sección primera de la Sala de lo Penal que preside el juez Javier Martínez Lázaro, Santesteban Arizcuren se ha negado a declarar a las preguntas del Ministerio Público, y ha asegurado que el día de la manifestación se encontraba en Ansoain (Pamplona) celebrando el día del socio de la asociación cultural Bikupe Elkartea.
También han intervenido en el juicio Ignacio Senguerín Gómez y Mikel Esparza Martínez, dos miembros de la asociación que han corroborado que el procesado se encontraba con ellos, y a preguntas de la defensa, que ejerce la letrada Amaia Izko, ambos han destacado que recuerdan los festejos porque ese año hubo una intoxicación por un brote de salmonelosis que afectó a muchos de los socios.
Según expuso el fiscal Jesús Santos en su escrito provisional de calificación, el 13 de septiembre de 2008 Santesteban Arizcuren junto con otros ocho presuntos miembros de Segi participaron en una manifestación en Pamplona llevando una pancarta cuyo lema era "Stop estado de excepción. Demokrazia Nafarroarentzat Euskalherriarentzat" (Democracia para Navarra y Euskal Herria).
Posteriormente, incendiaron varios contenedores formando una barricada, rompieron los cristales de dos entidades bancarias y las rociaron con líquidos inflamables, para después prenderlas fuego con varios cócteles molotov.
Los artefactos afectaron a parte de la calzada, a la fachada y acabaron inutilizando los cajeros automáticos de la Caja Rural Navarra y de Banesto, provocando unos desperfectos de más de 20.000 euros.
Además de Araguas, por estos hechos fueron condenados Iñaki Marin Mercero y Diego Javier Octavio Martinikorena a penas de cuatro años y medio, y dos años y medio de prisión, respectivamente.
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