Buenos Aires, 14 abr.- El Gobierno de Argentina admitió hoy que los grupos de narcotraficantes que operan en la ciudad de Rosario, escenario la semana pasada de un despliegue de fuerzas de seguridad sin precedentes, aún no han sido "descabezados".
"Esto recién empieza. Es un trabajo de mucha templanza y paciencia, hay que ir centímetro por centímetro", dijo el secretario de Seguridad argentino, Sergio Berni, en declaraciones radiales.
El funcionario reconoció que aún "no están descabezados los grupos narcos" que operan en Rosario (a 300 kilómetros al norte de Buenos Aires) y sostuvo que las bandas son "como los hormigueros: usted patea uno y aparecen dos".
La semana pasada unos tres mil efectivos de diversas fuerzas federales fueron desplegadas en Rosario para hacer un gigantesco operativo contra el narcotráfico, que incluyó 89 allanamientos y la detención de 24 personas.
El amplio despliegue de las fuerzas de seguridad se llevó a cabo tras un mes de planificación y fue ordenado por dos magistrados federales con el objetivo de desarticular las principales bandas de narcotraficantes que operan en esa zona de Argentina.
Tras el operativo, el Gobierno resolvió dejar unos dos mil efectivos desplegados en esa ciudad.
En el transcurso de 2014, Rosario ya lleva 80 muertos a causa del crimen organizado, según denunciaron recientemente organizaciones no gubernamentales.
El crecimiento del fenómeno del narcotráfico en Argentina ha generado en los últimos meses, por parte de la oposición y de la Iglesia católica, fuertes reclamos al Gobierno de mayores medidas para combatir este flagelo.
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