El próximo 8 de marzo, Día de la Mujer, diversas asociaciones y sindicatos han previsto convocar nuevas paros para reivindicar la igualdad, además de cambios en la legislación laboral. El Gobierno, pese a que la reivindicación va en contra de la política que está llevando a cabo, ha asegurado que la opción parece una "buena postura" ya que, "hay que seguir avanzando" en la lucha por la igualdad y cree que el Día de la Mujer debe volver a ser en 2019 un "aldabonazo importante sobre las conciencias cívicas y políticas".
"Nos parecerá muy bien que los sindicatos convoquen paros. La participación, la manifestación, la presión legítima y pacífica de las mujeres en el amplio mundo del movimiento feminista al que pertenezco desde siempre estarán aquí", ha declarado la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, este miércoles en un desayuno informativo de Nueva Economía Fórum.
A pesar de ello, no prevé que vaya a haber una huelga feminista, sino paros de dos horas en una jornada en la que se volverán a denunciar las condiciones de desigualdad que padecen las mujeres. La ministra de Igualdad, que ha insistido en que el Gobierno es feminista "sin ambages", ha asegurado que el feminismo está impulsando un "verdadero reseteo de la sociedad", por lo que considera "rechazable pero entendible" que la ultraderecha esté en contra de ello.
Calvo ha sostenido que el problema de las derechas tradicionales es que "se estén radicalizando" y ha defendido que España "no se puede permitir ni un solo desliz de extremismos ni radicalidades que pongan en riesgo" cuatro décadas de democracia. El feminismo "ha venido para quedarse, no para ser una optativa de la política, sino para ser una troncal", ha destacado la vicepresidenta, quien ha apuntado que las mujeres utilizarán "las calles, las manifestaciones y la presión" para exigir la igualdad porque son "un actor político de primera".
El secretario general de CCOO, Unai Sordo, y el de UGT, Pepe Álvarez, anunciaron un proceso de movilizaciones que culminaría el 8 de marzo en una jornada de paros de dos horas con reivindicaciones feministas. El acto, según explicaron ambos, va más allá del Día de la Mujer y es un primer paso en un proceso en el que "si no hay respuesta del Gobierno, habrá movilización". "Queremos que el Gobierno y los actores económicos sepan que no vamos a esperar a que se acabe la legislatura para abordar esta situación", apuntó Álvarez en referencia a la actitud del Gobierno durante la legislatura.
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