Dávalos y su esposa Natalia Compagnon, son investigados por uso de "información privilegiada" y "tráfico de influencias" para concretar un millonario negocio inmobiliario, caso destapado en febrero pasado y por el cual se presentó nuevamente ante la Fiscalía de la ciudad de Rancagua, a 90 km al sur de Santiago.
El hijo de Bachelet, quien compareció por más de dos horas y no dio declaraciones a la prensa, atestiguó sobre el supuesto formateo de la información a la computadora que utilizaba antes de renunciar al cargo de director del Área Sociocultural de la Presidencia -días después de conocido el hecho- la cual fue incautada e inspeccionada por la Policía para determinar si contiene información del caso.
"La idea es contrastar los informes que entregó la policía sobre los peritajes realizados a la computadora de Dávalos Bachelet y su declaración", dijo Mario Zumelzu, abogado querellante en el caso, tras la declaración del hijo mayor de la mandataria.
La arista de este caso se abrió luego que un funcionario de la oficina de informática de la Casa de Gobierno reveló ante una comisión del Congreso que también investiga el caso, que Dávalos le pidió borrar información de la computadora que usaba.
Dávalos y su esposa atestiguaron anteriormente en dos ocasiones ante la Fiscalía chilena por este caso que provocó un duro golpe a la imagen de la presidenta Bachelet, cuyos índices de respaldo cayeron a niveles históricos menores al 30% según encuestas.
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