Rosell encarga un informe de urgencia para frenar la ofensiva fiscal de Sánchez

  • Los empresarios presentarán este documento al Gobierno con el objetivo de que reconsidere elevar el Impuesto de Sociedades y destopar cotizaciones.
Reunión de los agentes sociales con Sánchez y Valerio.
Reunión de los agentes sociales con Sánchez y Valerio.
Pool Moncloa/Fernando Calvo
Reunión de los agentes sociales con Sánchez y Valerio.
Reunión de los agentes sociales con Sánchez y Valerio / Pool Moncloa - Fernando Calvo

Aumenta la tensión entre los empresarios y el Gobierno de Pedro Sánchez. Los anuncios del Ejecutivo de elevar el Impuesto de Sociedades al 15% (sin precisar aún si teniendo en cuenta el resultado contable o la base imponible) y de destopar las cotizaciones sociales han caído como una losa en la CEOE. La patronal se encuentra en alerta máxima ante dos decisiones que repercutirían directamente en la cuenta de resultados de más de 1,4 millones de empresas. Por eso, Juan Rosell y Antonio Garamendi han pasado a la ofensiva y preparan un informe para intentar convencer a Sánchez y a la ministra María Jesús Montero de que las empresas ya soportan una carga impositiva elevada y que no quieren más presión fiscal.

La CEOE, que representa en esta batalla contra el Gobierno a las compañías del Ibex 35, a los grandes grupos empresariales y las pymes (sociedades no integradas en grupos), considera que elevar Sociedades y destopar las cotizaciones sería toda una declaración de guerra contra ellos. Por eso ya han comenzado su labor de lobby en un momento que coincide con la firma de un pacto salarial para mejorar los sueldos de todos los trabajadores entre un 2 y un 3% y elevar el salario mínimo por convenio a los 1.000 euros mensuales en 2020.

La primera decisión que va a tomar la CEOE es presentar a Pedro Sánchez y la ministra María Jesús Montero un detallado trabajo sobre la realidad de la fiscalidad empresarial en España, según desvelan a La Información fuentes de la cúpula de la patronal. El documento se está redactando en los despachos de Diego de León y se remitirá a Moncloa y Hacienda a lo largo de este mes de julio con el objetivo de que el Gobierno reconsidere su 'amenaza': "Lo estamos terminando y se lo vamos a enviar pronto, no queríamos presentarlo en la reunión con los sindicatos pero lo recibirán en los próximos días", añaden las mismas fuentes.

El argumentario de la CEOE

El informe que está preparando la CEOE para Sánchez y Montero se centra en explicar al Gobierno que la tributación empresarial en España se encuentra a la altura de la media europea, tanto en Sociedades como en cotizaciones. Quieren hacer ver al Ejecutivo, por tanto, que las grandes empresas no tributan a tipos tan reducidos como se está diciendo en algunos foros y desmontar las declaraciones de la ministra de Hacienda, que destacó en la Cadena SER que las grandes compañías españolas no están contribuyendo al Fisco en relación a sus beneficios reales por la "arquitectura de deducciones posteriores que realizan y que han dejado el tipo real que pagan en torno al 12%".

La CEOE de Rosell y Garamendi maneja otras cifras y así se las trasladarán al Gobierno. En concreto, van a explicar al Ejecutivo por escrito que las grandes empresas pagan en España un 19,2% de Impuesto sobre Sociedades. Esa cifra es aún mayor en el caso de las 35 cotizadas del selectivo español, cuyo tipo efectivo llega al 21% si se tienen en cuenta los impuestos que ya pagan en el extranjero, siempre según los cálculos de los empresarios.

A este tributo hay que sumar las cotizaciones empresariales a la Seguridad Social, otro aspecto que el Gobierno quiere tocar (destopar) y ante lo que la CEOE se opone en redondo. Los empresarios también aportarán sus cifras a Sánchez: calculan que la recaudación de la Agencia Tributaria por estas cotizaciones ya es lo suficientemente elevada (en 2015 fue de 85.000 millones) y que incluso es de un importe superior a los ingresos totales por IVA o por IRPF. La patronal concluye, en definitiva, que la recaudaciones del Estado por el Impuesto sobre Sociedades y las cotizaciones empresariales superan los 100.000 millones de euros, más del 10% del PIB del país.

En la CEOE también destacan que la tributación de las grandes empresas españolas no es tan reducida como se dice: "Si fuera cierto España sería un lugar donde las multinacionales estarían deseando venir y competiríamos contra Irlanda, donde el Impuesto sobre Sociedades es del 12,5%; sin embargo esto no es así y las compañías no hacen cola para traer sus centros de operaciones".

Ambiente de tensión entre Gobierno y empresarios

Este martes Juan Rosell y Antonio Garamendi se veían por segunda vez las caras con Pedro Sánchez desde que es presidente del Gobierno. A la ministra Montoro no la conocen aún en persona, pero ya son conscientes de sus intenciones fiscales. Por eso la CEOE no ha esperado ni cien días para arremeter contra el plan tributario del Ejecutivo socialista que les toca de lleno. Desde la patronal advierten que si los anuncios en materia de impuestos se plasman finalmente en leyes implicará un aumento de los costes para las empresas, lo que puede conllevar que algunas decidan no subir los salarios a sus trabajadores, tal y como se ha acordado. "Si queremos cumplir la subida salarial tenemos que ir a una mejor calidad en el empleo y no hacia una mayor tributación", alertan.

Pedro Sánchez saluda a Juan Rosell en Moncloa
Pedro Sánchez saluda a Juan Rosell en Moncloa / Pool Moncloa/Fernando Calvo

A los empresarios les llama la atención la excesiva alegría con la que el Gobierno está hablando de aumentar el gasto. Les preocupa que se dispare el déficit y se vuelva a periodos "muy peligrosos" durante la crisis. "Si no hemos sido capaces de reducir el déficit en estos años, ¿cómo lo vamos a hacer con tipos de interés diferentes?", se preguntan en el CEOE. En la patronal calculan que lo que ahora son imágenes de entendimiento con Sánchez tornará en desencuentros si sigue adelante con sus planes en materia fiscal.

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