Iñigo Errejón sigue haciendo carrera política por su cuenta, pero dejando algún que otro recado al que hasta hace poco era su otra mitad, Pablo Iglesias. Después de su traumática salida de Podemos, el ahora dirigente de Más Madrid no se muerde la lengua y ha confesado que él sí habría aceptado la oferta que Pedro Sánchez hizo al líder de la formación morada para ser investido.
Así lo afirma en una entrevista al diario 'El País' publicada este lunes, en la que responde con un sí rotundo a la pregunta de si él hubiera aceptado esa oferta de gobierno. Además, asegura que en la política actual "hace falta mirada larga, pues nadie está pensando dentro de 10 años, sino en el próximo telediario y así es imposible hacer ningún sacrificio porque nada vale la pena si todo es mercancía que se gasta rápidamente".
Asimismo, Errejón cree esa "mirada larga" es lo contrario de Twitter, "de los fuegos artificiales y de este régimen de rueda de prensa permanente en el que vivimos. Tenemos que dejar de contarnos todo el rato lo que está pasando y mirar qué queremos que pase en adelante". Por otro lado, da su opinión acerca de un posible salto de Más Madrid a la política nacional.
Al preguntarle si le suena mejor 'Más País', el político recalca que le suena mejor Más Madrid, porque en la capital intentan "un Gobierno diferente y Ciudadanos se retrata eligiendo a Vox cuando tenían nuestra mano tendida". Según Errejón, eso ha hecho que se les mire desde el resto de España y cree que entre dos grupos "que no se ponían de acuerdo" se ha usado mucho el rumor de su salto a la política nacional "para meterse miedo". No obstante, tampoco descarta esa posibilidad, pues su intención es hacerlo bien en este nuevo partido.
Por otro lado, confiesa cuál fue su día más feliz en política, aunque realmente fueron dos: cuando Manuela Carmena entró a gobernar en Madrid y cuando tomó posesión de su escaño en el Congreso de los Diputados. Sin embargo, cuando se le pregunta por Vistalegre -cuando se disputó con Iglesias el liderazgo de Podemos- señala que "ese fue un día feo", al igual que cuando se repitieron las generales en 2016. Pero, también fueron tristes para él las Navidades pasadas, "cuando asumí que estaba en un sitio donde no me querían, que se había desplazado de aquello por lo que lo fundamos y tomé la decisión de abrir algo más grande con Manuela".
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