Jordi Sevilla defiende que el PP recrudeció la crisis por interés partidista

Carlos Heras

Madrid, 24 ene.- El exministro socialista Jordi Sevilla cree que el Partido Popular recrudeció la crisis económica y provocó que la prima de riesgo se multiplicara por tres cuando llegó al Gobierno por aplicar sus "intereses partidistas" tanto a la gestión del rescate de Bankia como a la "herencia presupuestaria recibida".

"Seis meses que condujeron al rescate", su nuevo libro publicado el pasado 22 de enero (Deusto Ediciones), relata la zozobra del actual Ejecutivo para hacer frente a los problemas del sistema financiero, protagonizados por la situación de Bankia, y que desembocaron en una ayuda europea de unos 41.000 millones de euros.

En una entrevista con Efe, Sevilla recuerda que el Gobierno de Mariano Rajoy, a la hora de elaborar sus primeros Presupuestos Generales, los de 2012 -ganó las elecciones de noviembre de 2011- "dice que las cuentas españolas no son fiables y los pospone cuatro meses" hasta después de las elecciones andaluzas.

Esta actitud interesada -según su análisis se esperó a que se celebraran los comicios andaluces antes de anunciar un recorte de 27.300 millones de euros- aumentó la desconfianza del sistema financiero internacional hacia la economía española.

Pero uno de los mayores errores del Gobierno, según Sevilla, fue la gestión del caso Bankia, que se llevó casi 18.000 millones de ese rescate y que se sumaron a los cerca de 4.500 prestados en el pasado hasta superar los 22.400.

En este caso, según Sevilla, se actuó "tarde, mal y por imposición europea", porque el presidente de Bankia era el exministro de Economía del PP y exdirector gerente del FMI, Rodrigo Rato.

"Cuando el nuevo Gobierno toma posesión, el Banco de España tiene ya muy avanzado el procedimiento para sustituir al equipo gestor de Bankia", relata Sevilla, pero el Ejecutivo lo paraliza para tomar las riendas del proceso, ya que además Rato había sido jefe del ministro de Economía, Luis de Guindos, que fue su secretario de Estado.

"Yo creo que si el presidente de Bankia hubiera sido un profesional que no hubiera tenido ese peso en el Partido Popular el tema se habría zanjado antes y a lo mejor no habría hecho falta el rescate", asevera el socialista.

Sevilla da mucha importancia al caso porque considera que el problema de España era el financiero y no el presupuestario, que "afectaba a toda la zona euro".

Aunque defiende la necesidad del saneamiento del sistema financiero, considera que se podrían haber hecho otras cosas para que no pareciera que se rescataba a la banca antes que a los ciudadanos, como "todo lo relacionado con la dación en pago y procesos de suspensión de pago de los ciudadanos".

"Creo que se podía haber sido un poco más sensible a ese problema, sobre todo cuando se estaban inyectando esas cantidades en el sistema bancario", sentencia.

Sevilla considera que el haber retrasado la creación del "banco malo" ha sido "una de las grandes carencias que tuvo el abordaje de la crisis financiera en nuestro país" por parte de los dos grandes partidos y lamenta que haya acabado siendo una imposición externa.

Asimismo, el autor afirma que ninguno de los dos sucesivos gobiernos (del PSOE y el PP) "se tomó en serio la necesidad de grandes pactos de Estado".

A pesar de que Sevilla considera que, tras el rescate a la banca de España, la Unión Europea mandó un mensaje contundente para defender el proyecto del euro, cree que la crisis aún no ha acabado.

"Me gusta decir que estamos saliendo de la recesión, pero no de la crisis", apostilla, en referencia a "unos españoles que han estado y siguen estando en crisis, aquellos que han perdido el trabajo y tienen todavía la hipoteca del piso por pagar".

"Estamos repartiendo empleo, donde antes una persona trabajaba ocho horas ahora hay dos que trabajan cuatro, y generando esta figura que se está llamando el trabajador pobre", lo que identifica como un problema, ya que "el nódulo de la recuperación es el consumo de las familias".

Respecto al ascenso de opciones electorales de ruptura como Podemos, Sevilla alerta de que "está introduciendo incertidumbres políticas" y "no está claro que los resultados electorales vayan a garantizar la gobernabilidad", cosa que en el actual contexto "sería un problema", concluye.