Siguiendo el esquema de la moción de censura presentada por el PSOE en mayo de 1980, será José Luis Ábalos, en su calidad de Secretario de Organización, el encargado de defender la moción de censura mañana jueves 31 de mayo. En la moción contra Suárez, Alfonso Guerra, entonces Secretario de Organizacion, fue el encargado de subir a la tribuna en nombre de los socialistas.
Le seguirá Margarita Robles, en su calidad de portavoz del grupo parlamentario socialista, interviniendo en el turno que corresponde a su grupo parlamentario, como máxima responsable del mismo. La tradición apunta a que el portavoz parlamentario es quien expone los motivos que han llevado al grupo parlamentario de turno a presentar una moción de censura, como ocurrió en la de que lideró hace un año Unidos Podemos, cuando Irene Montero, como portavoz, defendió la iniciativa, mientras que Pablo Iglesias era el candidato.
Ábalos abrirá de esta manera el debate, con una intervención sin tiempo limitado y podrá ser respondido por el Gobierno, antes de que hable el candidato de la moción, Pedro Sánchez. Así ocurrió el año pasado con la moción presentada por Podemos, cuando Rajoy decidió contestar a la portavoz parlamentaria de los 'morados', Irene Montero.
Ábalos ya representó a los socialistas en la moción de censura de hace un año de Pablo Iglesias contra Rajoy, en su calidad de portavoz provisional del grupo, cuando ya se perfilaba como hombre fuerte de Pedro Sánchez en su nueva etapa al frente del PSOE. Su discurso de entonces, que recibió la ovación de todos sus compañeros puestos en pie, buscó la cohesión interna reivindicando el orgullo socialista tras la fractura del 39 Congreso. El diputado valenciano también logró tender puentes con Podemos, rotos en aquel momento por la gestora.
La moción de censura, este jueves
Tras reunirse con la Junta de Portavoces, la presidenta del Congreso ,Ana Pastor, explicó que el jueves el pleno se iniciará a las 9.00 y terminará a las 21.00. El viernes empezará a la misma hora y concluirá a las 14.30. Respecto a la rapidez con la que convocó el pleno, la presidenta de la Cámara dijo que, a diferencia de la moción que presentó Podemos en 2017 (tardó 25 días en convocarse), ahora no había ningún trámite presupuestario y el Congreso liberó su agenda. La urgencia de la convocatoria fuerza al PSOE a acelerar sus contactos y negociaciones con el resto de grupos.
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