El magistrado de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón ha dado el primer paso para sentar en el banquillo al que fuera comisario jefe de Barajas, Carlos Salamanca, y al empresario Francisco Menéndez Rubio. A ambos se les investigó en el marco de la primera pieza de la macrocausa Tándem que ahora el instructor da por zanjada. Se trata de la cuarta línea de investigación de este macroprocedimiento que queda a las puertas de juicio. En este caso, el instructor atribuye al que fuera Tándem de Villarejo los delitos de cohecho y contra los derechos de los ciudadanos extranjeros por recibir presuntamente dádivas del empresario acusado y de ciudadanos extranjeros a cambio de permitir su entrada en el país.
Así lo acuerda el magistrado en un auto al que ha tenido acceso La Información y en el que explica que Menéndez Rubio (conocido como 'El Pagafantas') obsequió entre los años 2012 y 2015 con "dádivas de lujo en dinero y en especie" al comisario amigo de Villarejo. El empresario lo hizo a cambio de que Salamanca facilitara la entrada ilegal en el país de personas de su entorno así como de ciudadanos guineanos con los que hacía negocios. El "tratamiento VIP" dispensado consistía en recogerles a su llegada a Madrid en la escalerilla del avión y trasladarles en vehículos oficiales hasta la salida del aeropuerto con el fin de evitar la vigilancia de aduanas.
Menéndez Rubio y Salamanca son dos de los principales protagonistas de la causa por los encargos privados de Villarejo en tanto fueron de los primeros investigados en la macrocausa. De hecho, Salamanca fue uno de los detenidos en el operativo por el cual se arrestó a Villarejo en noviembre de 2017 y que dio inicio a este asunto. El anterior magistrado instructor Diego de Egea archivó las pesquisas abiertas para el que fuera jefe del puesto fronterizo del aeropuerto, sin embargo la Fiscalía Anticorrupción recurrió su decisión al considerarle parte del entramado del agente encubierto. Ahora el magistrado le deja a un paso del banquillo junto con Menéndez Rubio, a quien también le imputa delitos contra la Hacienda Pública.
La colaboración del Pagafantas
Tanto Menéndez Rubio como Salamanca explicaron en sede judicial que fueron presentados por Fernando Luengo, un empresario fallecido en el año 2014. Este les puso en contacto cuando 'El Pagafantas' le comentó que tenía una serie de servicios que prestar en España a sus clientes guineanos de la empresa Gepetrol. Fue entonces cuando Luengo le dijo que "un buen amigo le facilitaría la vida allí", en referencia a Salamanca. Entre las personas que lograron entrar en territorio español de manera ilegal se encontraban Mba Nguema Aleme, miembro de la petrolera y vinculado "estrechamente" a Crispín Edu Tomo Maye. Este último es familiar indirecto del presidente de Guinea, Teodoro Obiang, el cual se convirtió en uno de los grandes clientes de Villarejo en el marco del proyecto bautizado como 'King'.
La cooperación del Pagafantas con los investigadores ha facilitado mucho el avance de las pesquisas. En sus cuatro declaraciones en Anticorrupción y en el juzgado, Menéndez Rubio admitió que fue Salamanca quien le puso en contacto con Villarejo para la contratación del proyecto King en el marco del cual también colaboró el comisario de Salamanca al saltarse los controles del aeropuerto para que los implicados en este espionaje entraran en el país. El auto del juez recoge al respecto que Salamanca no explicó de manera convincente este asunto cuando fue preguntado por ello ni tampoco justificó las irregularidades detectadas por los investigadores en los expedientes administrativos de concesión de visados en frontera.
Porsches, relojes de lujo y viajes
Otro de los aspectos acreditados ha sido los regalos que recibió el que fuera Tándem de Villarejo a cambio de todas estas concesiones. De acuerdo con el auto, recibió un vehículo Porsche Cayenne 3190GZR cuyas reparaciones corrieron a cargo de Framen Consultores y Asesores (empresa de la que era único administrador Menéndez Rubio) y otro Porsche Panamera, valorado este último en más de 116.000 euros. A ello hay que añadirle la entrega que le hizo en el año 2012 de tres relojes de lujo por importe total de 80.000 euros. En el registro de su domicilio, practicado durante las detenciones de noviembre de 2017, los agentes se incautaron de un total de 61 relojes, de los cuáles al menos 14 eran originales y 42 imitaciones. Salamanca y su mujer también fueron obsequiados con viajes que les pagó el empresario confeso.
Las pesquisas realizadas en el marco de esta pieza número 1 del caso ponen de relieve como entre abril y mayo de 2012 El Pagafantas les regaló un viaje a Londres por importe de 16.000 euros. Entre las dádivas que recibió se incluyen también la cesión de su plaza en el palco del Santiago Bernabéu y dinero en metálico que ascendería a 135.000 euros en un plazo de tres años. Preguntados por estos extremos en sede judicial, Salamanca negó la procedencia ilícita de las cuantías encontradas en su domicilio y dijo que llegó a acumular hasta 225.000 euros en metálico en su hogar por motivos estrictamente de seguridad.
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