Madrid, 9 sep.- La Audiencia Nacional juzga el próximo jueves a tres miembros de los GRAPO, entre ellos Fernando Silva Sande, que en su día reveló a la Policía datos sobre la muerte de Publio Cordón, por la colocación de una bomba en un restaurante de Madrid en 1998 que causó daños materiales.
A los acusados -Manuel Pérez Martínez, alias "Camarada Arenas", Fernando Silva Sande y María Victoria Gómez Méndez- el fiscal les pide diecisiete años de prisión por un delito de estragos cometido por personas pertenecientes a un grupo terrorista.
Los hechos se remontan al 29 de enero de 1998, cuando sobre las 05.15 horas explosionó un artefacto en el restaurante "Tamara", colindante con la empresa de trabajo temporal People, y situado en los bajos del número 33 de la Avenida de América.
La bomba provocó un agujero de 35 centímetros de diámetro y daños en muros y tabiques del edificio del restaurante que pusieron en peligro a los residentes.
Según el Ministerio Público, Manuel Pérez Martínez, en su calidad entonces de secretario general y líder máximo de la organización GRAPO, y los otros dos procesados, todos ellos miembros del "Comando Central", decidieron atentar contra la empresa People.
Para tal efecto, una persona no identificada colocó en los servicios del restaurante "Tamara", colindante con la citada empresa de trabajo temporal, un artefacto con un kilogramo de explosivo y que ocasionó daños tasados en 191.772 euros.
El fiscal solicita también que los acusados indemnicen a la empresa People con 105.752 euros, al restaurante "Tamara" con 85.261 euros, a la comunidad de propietarios de Avenida de América número 33 con 603 euros y al dueño de un local de este edificio con 154 euros.
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