Madrid, 13 ene.- La austeridad y el ahorro se han colado en los congresos confederales que CCOO y UGT celebrarán los próximos meses, en los que sus secretarios generales, Ignacio Fernández Toxo y Cándido Méndez, respectivamente, decidirán si optan a un nuevo mandato.
El uso de sedes propias en vez de alquilar palacios de congresos, la reducción del número de delegados, de invitados y de los días de duración son los efectos más visibles de los recortes.
CCOO ha convocado su X Congreso confederal, en el que Toxo optará a su segundo mandato consecutivo, para los días 21 a 23 de febrero.
En vez de alquilar el palacio de Congresos de Ifema utilizará la sede que CCOO-Madrid tiene en la calle Lope de Vega.
Su menor espacio ha generado que se tenga que reducir el número de delegados de las distintas uniones territoriales y federaciones que participan en el congreso.
Así se pierde la emblemática cifra de los 1.001 delegados (en homenaje al juicio al que se sometió durante la Dictadura a la dirección de CCOO) y se pasa a 750.
También los habituales 3,5 días de duración de los congresos se recortan a 2,5: en vez iniciarse un miércoles comenzará el jueves y, como es tradicional, el sábado a mediodía terminará con la intervención del secretario general y la presentación de su Ejecutiva.
La Comisión Ejecutiva de CCOO que salga elegida tendrá un número menor al actual (23 secretarios más 21 vocales) debido a que no será necesario integrar a las diferentes corrientes que existieron con el antecesor de Toxo, José María Fidalgo.
Ahora las aguas están más calmadas y no se espera que salga un candidato alternativo, por lo que es más que previsible que vuelva a ser reelegido Toxo, quien todavía podrá presentarse dentro de cuatro años a un tercer mandato extraordinario.
Como novedad se ha recuperado el que los congresos de las uniones territoriales y las federaciones se celebren antes del confederal.
Según indican fuentes de CCOO, todo apunta a que los secretarios generales territoriales revalidarán sus puestos.
En el caso de Madrid, Javier López no se puede presentar porque ha agotado el límite de mandatos y la previsión es que salga Jaime Cedrún, señalan las mismas fuentes.
Lo único que no ha seguido el guión es que Felipe López haya perdido la secretaría general de la federación de Industria en favor de Agustín Martín.
Por su parte, UGT celebra su 41 Congreso confederal entre los días 10 y 12 de abril, en los que se elegirá secretario general, cargo que desempeña Cándido Méndez de manera consecutiva desde 1994.
Méndez, igual que Toxo, no ha desvelado sus intenciones, pero sí ha dicho que no le faltan ganas ni energía para optar a un nuevo mandato de cuatro años.
El Congreso que decidirá si sigue al frente de UGT tampoco se celebrará en un palacio de congresos, y se utilizará la sede que UGT Madrid tiene en la Avenida de América.
Esto ha obligado también a reducir el número de delegados de los 800 habituales a 600, ha explicado a Efe el secretario de Organización de UGT, José Javier Cubillo.
Además, el Congreso comenzará a las 16:00 horas del miércoles 10 de abril y no por la mañana como era tradicional.
Con este cambio se logra un ahorro considerable, ya que los delegados no tienen que llegar un día antes a Madrid y pernoctar en la capital para acreditarse.
Además, el viernes a mediodía también habrá terminado el Congreso, por lo que los delegados pueden partir sin tener que quedarse una noche más en Madrid.
Otro recorte considerable de gasto vendrá por la utilización de medios tecnológicos, ya que los documentos de trabajo no se imprimirán, sino que se consultarán por vías telemáticas o se entregarán en memorias portátiles, según Cubillo.
UGT también ha reducido "muy considerablemente" el número de invitados, así como el regalo de bienvenida que se entrega a los delegados.
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