La brasileña juzgada por matar a sus dos bebés dice que lo hizo por venganza

Lisboa, 19 jun.- La brasileña Keli Oliveira, de 32 años, confesó ante el Tribunal portugués que la juzga por matar a sus dos bebés a finales del pasado año que cometió ambos crímenes para vengarse del padre de ambos.

Oliveira, en prisión preventiva desde el 24 de diciembre pasado, cuando las autoridades lusas la detuvieron después de cuatro días en fuga como supuesta autora de un incendio que mató a sus hijos, alegó que el padre quería separarse de ella y llevarse a los niños con él.

"Yo no me quedaría con mis hijos (de once meses y dos años y medio), pero él (compañero y padre de las víctimas) tampoco se iba a quedar", manifestó la mujer, quien afirmó que sufría una depresión profunda.

Según Oliveira, el padre no la dejaba llevarse a los dos pequeños a Brasil y temía que él se quedase con la custodia de los menores, pues ella estaba en Portugal de forma ilegal y desempleada.

Mostró arrepentimiento por lo que hizo a sus hijos, pero no se retractó del dolor que dice haber causado tanto al padre como a su suegra.

"Era incapaz de vivir sin mis hijos cerca de mí", declaró ante los jueces.

Keli Oliveira, actualmente internada en el ala psiquiátrica de la cárcel Caxias (Coimbra), está acusada de haber provocado un incendio en la vivienda en la que habitada con su pareja y sus hijos situada en una barriada del municipio luso de Alenquer, a 47 kilómetros al norte de Lisboa.

Después del fuego, la mujer abandonó la casa y avisó a su suegra por teléfono del incendio y la muerte de los niños.

A continuación, vagó por carreteras y zonas rurales hasta que fue reconocida por un agente policial que la detuvo.