La derecha portuguesa también utiliza el 'fantasma' de Syriza en campaña

    • El primer ministro portugués, Pedro Passos Coelho invocó el miércoles el fantasma de Tsipras durante un debate televisado con el socialista António Costa
    • Tras aparecer como favorito durante mucho tiempo, el Partido Socialista se encuentra empatado en los sondeos con la coalición de centro derecha de Passos Coelho.
Passos Coelho critica a los medios lusos por no valorar los avances de Portugal
Passos Coelho critica a los medios lusos por no valorar los avances de Portugal

El primer ministro portugués, Pedro Passos Coelho (centro derecha), invocó el miércoles por la noche el fantasma del partido griego Syriza durante un debate televisado con el socialista António Costa, su rival en las elecciones legislativas del 4 de octubre.

"Las críticas que usted realiza a las medidas de austeridad ya se escucharon en Grecia, por parte de Syriza, y no son realistas", dijo Passos Coelho a su adversario.

"A usted le ha gustado tanto la troika que ha ido incluso mucho más lejos que las medidas exigidas", respondió Costa, quien prometió pasar página a la austeridad, pero sin dejar de lado los compromisos del Estado portugués con sus acreedores.

En abril de 2011, Portugal solicitó una ayuda financiera internacional de 78.000 millones de euros, acordados por la troika de acreedores (UE, BCE y FMI) a cambio de un severo plan de austeridad.

"Usted pasará a la historia como el primer jefe de gobierno que deja a su sucesor un país menos rico que el que recibió", indicó Costa al jefe de gobierno portugués, quien defendió por su parte la "necesidad" de estas medidas de rigor, "ya que había una crisis y no había dinero".

Passos Coelho, quien destaca la reciente recuperación económica y la reducción del desempleo, tiene previsto mantener la política de austeridad en caso de ser reelegido, aunque disminuyendo gradualmente la presión fiscal.

Respecto al caso del Banco Espírito Santo, el primer ministro portugués urgió a los clientes de la entidad, que se manifiestan habitualmente para reclamar el dinero perdido con el hundimiento del banco en agosto de 2014, a acudir a la justicia.

"La CMVM [el regulador bursátil portugués] y el Banco de Portugal son los que deben encontrar una solución, pero no llegan a ponerse de acuerdo, cosa que lamento", añadió.

Tras aparecer como favorito durante mucho tiempo, el Partido Socialista se encuentra empatado en los sondeos con la coalición de centro derecha de Passos Coelho.

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