"Hoy termina una larga travesía por el desierto para Izquierda Unidad", dijo Cayo Lara en 2011 cuando su partido se disparó tras la debacle socialista en las elecciones generales. Tenía razón por aquel entonces, pero estos cuatro años han dado para mucho y el auge de Podemos, entre otras cuestiones internas del partido, han puesto al partido a deambular sin rumbo por las dunas de la política española.
Desde que irrumpiera Podemos en al panorama político, IU ha ido perdiendo fuerza y en los últimos comicios se ha podido comprobar, perdiendo 400.000 votos. No solo está fuera de Madrid, sino también del Ayuntamiento de Valencia, y de la Asamblea de Extremadura. Del mismo modo, no estarán en cuatro de los ochos parlamentos autonómicos en los que consiguió colocar representación en 2011.
Su ausencia en Madrid es todavía más dolorosa por tratarse del principal feudo de los comicios y porque será la primera vez que no estará en el Ayuntamiento desde las primeras elecciones democráticas de 1979. La candidatura deRaquel López se quedó lejos de convencer al electorado, obtenido un 1,7% de los sufragios, insuficiente para tener representación. Incluso en Rivas, su inexpugnable dominio desde 1991, se ha resentido.
La decisión unilateral de Cayo Lara de apoyar a López les ha dejado fuera de Madrid, mientras que Mauricio Valiente,la opción elegida por la militancia y número cuatro en la lista de Ahora Madrid, puede acabar en el Ayuntamiento si finalmente hay pacto con el PSOE.Trasvase de votos
El trasvase de votos de IU a Podemos y a sus plataformas ha sido uno de los motivos de la fuerte caída de Izquierda Unida. Los colectivos apadrinados por la fuerza que lidera Pablo Iglesias han obtenido excelentes resultados en Barcelona, donde gobernarán, y en Madrid, La Coruña y Zaragoza, donde están a un paso de hacerlo.
En muchas de estas ciudades, de hecho, las fuerzas secundadas por Podemos han superado en su estreno a los resultados que Izquierda Unida cosechó en los mismos feudos en las elecciones de 2011.
Izquierda Unida no ha podido hacer frente el huracán Podemos. Solo Zamora (que no contaba con presencia en la provincia e incluso ahora podría gobernar) se erige después de la tarascada. Asturias y Sevilla, en donde podría formar una trío de izquierdas para echar a Juan Ignacio Zoido de la alcaldía, son los otros feudos en los que la crisis no se ha dejado ver tanto.
Las disputas internas, López acabó llamando "miserable" a Alberto Garzón, tras la jornada electoral,porque, dice, "se ha dedicado a hablar mal de su organización", acabaron por enterrar casi desde un principio las pocas esperanzas que le quedaban a la organización.
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