La gran crisis que sufre Siria se está agravando, según el mediador

Damasco, 13 sep.- El mediador internacional para Siria, Lajdar Brahimi, dijo hoy a su llegada a Damasco que la "gran crisis" que sufre el país árabe desde marzo de 2011 se está agravando, según las declaraciones difundidas por la agencia oficial siria, Sana.

"Vinimos a Siria para llevar a cabo consultas con los hermanos sirios, pues hay una gran crisis que creo que empeora", aseguró el enviado especial de la ONU y la Liga Árabe.

Brahimi llegó hoy a Damasco, donde se reunirá el próximo sábado con el presidente sirio, Bachar al Asad, en su primera visita a Siria desde que asumió oficialmente la mediación a principios de este mes.

En declaraciones a la prensa en el aeropuerto de Damasco, el enviado especial para Siria instó al fin del derramamiento de sangre en el país y expresó su esperanza de que su misión tenga "éxito".

"Creo que nadie discrepa sobre la necesidad de cesar el derramamiento de sangre y el retorno de la armonía entre los habitantes de una sola patria", subrayó.

Brahimi permanecerá en Damasco tres días, durante los cuales mantendrá diversas entrevistas con autoridades sirias, con representantes de la oposición, y con funcionarios de la ONU basados en Siria, según explicó hoy desde Ginebra su portavoz, Ahmad Fawzi.

Sus reuniones comenzarán hoy con una entrevista con el ministro sirio de Exteriores, Walid al Mualem, a la que seguirán mañana un encuentro con los grupos de la oposición interna y el sábado con Al Asad.

El enviado especial para Siria asumió el cargo el pasado 1 de septiembre, cuando reemplazó al ex secretario general de las Naciones Unidas Kofi Annan, que intentó durante poco más de cinco meses poner fin, sin éxito, al conflicto.

Annan estableció un "plan de paz de seis puntos" que pronto se convirtió en papel mojado cuando su primera premisa, cumplir un alto el fuego entre las fuerzas gubernamentales y los grupos armados de la oposición, fue violado desde el primer día que tenía que entrar en vigor.

Brahimi, que ha definido su tarea de "extremadamente difícil", viaja acompañado de Mojtar Lamani, quien permanecerá en la capital siria para asumir sus nuevas funciones como Jefe de la Oficina del enviado especial en Damasco.

El conflicto que vive Siria desde hace 18 meses ha causado, según la ONU, 25.000 muertos, dos millones y medio de personas necesitadas de ayuda humanitaria, y más de 250.000 refugiados en las naciones vecinas.