La Iglesia boliviana pide ayuda para proteger templos tras una serie de robos

  • La Iglesia católica de Bolivia pidió hoy ayuda para preservar el patrimonio histórico, religioso y cultural de sus templos y santuarios, que en las últimas semanas ha sufrido un serie de robos supuestamente de parte de una misma banda.

La Paz, 24 abr.- La Iglesia católica de Bolivia pidió hoy ayuda para preservar el patrimonio histórico, religioso y cultural de sus templos y santuarios, que en las últimas semanas ha sufrido un serie de robos supuestamente de parte de una misma banda.

La Conferencia Episcopal Boliviana (CEB) afirmó hoy que hace lo posible para cuidar estos bienes, pero "en la práctica no tiene la ayuda técnica, ni económica necesaria para la seguridad interna de los templos y lugares abiertos al público, que sería deseable obtener del Gobierno y otras instituciones".

La posición fue fijada por la CEB en un comunicado difundido a los medios en el que expresa "su honda preocupación por la ola de robos perpetrados en los últimos meses en templos y santuarios".

Durante este mes fueron robadas piezas de oro y plata y piedras preciosas de cinco templos, entre ellos el de Copacabana, situado en la ribera del lago Titicaca, en la frontera con Perú.

El de Copacabana fue el robo más grave de todos porque los ladrones sustrajeron 18 joyas de las imágenes de la Virgen y el niño Jesús, de un valor incalculable, según la Iglesia católica.

Entre enero de 2010 y marzo de 2013 otras 16 iglesias fueron robadas en La Paz y Potosí, según datos de la prensa boliviana.

La CEB recordó que los templos albergan un riquísimo patrimonio de obras artísticas, muchas que datan del siglo XVII realizadas por los misioneros españoles y otras de arte mestizo que corresponde al trabajo de los indígenas evangelizados.

La institución reclamó "una constante y estrecha colaboración" entre la Iglesia, que posee esos bienes, y el Estado, porque este, según la Constitución, asume tuición sobre el patrimonio artístico, señala el comunicado, presentado por el sacerdote Giovani Arana.

La policía cree que los últimos cinco robos fueron cometidos por una misma banda y en la investigación del último, en Copacabana, está coordinando y trabaja con la Policía de Perú.

Mostrar comentarios