La investigación a CDC agita la campaña del 27-S y tensiona la lista de Mas

    • La Guardia Civil registró ayer las sedes de CDC y su fundación CatDempor el presunto cobro de comisiones a cambio de obra pública.
    • Mas y Junqueras evitan referencias en su discurso. El cabeza de lista, Raül Romeva, exige responsabilidades.
Agentes durante los registros, ayer, en la sede de CDC y de la Fundación CatDem.
Agentes durante los registros, ayer, en la sede de CDC y de la Fundación CatDem.

La investigación a Convergència Democràtica de Catalunya (CDC) por el presunto pago de comisiones ilegales del 3% por obras públicas le ha estallado al partido de Mas seguramente en el peor de los momentos: la carrera hacia las elecciones del 27-S, claves en la estrategia del president de demostrar la fuerza del soberanismo.

El 'momento' de la operación, dirigida por el Juzgado de Instrucción número 1 de El Vendrell (Tarragona), no fue desaprovechado por los integrantes de la lista Junts pel Sí, la candidatura unitaria en la que se integran Mas con el presidente de ERC, Oriol Junqueras, y otros miembros de la sociedad civil para reforzar sus discursos por la independencia. No obstante, tanto Mas como Junqueras evitaron las referencias a Convergència. El proceso soberanista "no romperá Cataluña", aseguró el president, seguro de que el 27-S la lista tendrá "mayoría".

Antes, su conseller de Presidencia, Francesc Homs, había calificado de "espectáculo televisivo" una operación policial que, asegura, "no tiene voluntad de hacer justicia, sino de hacer daño" a Convergència.

"Es un acto de campaña electoral", apostilló Homs, quien denunció filtraciones a los medios de comunicación por parte del Estado."No tenemos nada que esconder", zanjó el conseller que a su vez defendió la figura de Mas, pues es "quien ha hecho más en los últimos años para luchar contra la corrupción".

El cabeza de lista, Raül Romeva, sí fue crítico con su discurso, exigiendo desde primera hora que se asuman responsabilidades. "Recibiremos amenazas, pero aguantaremos porque sabemos qué queremos hacer".

La Guardia Civil registró ayer desde primera hora de la mañana, en el marco de la operación 'Petrum II',la sede deConvergència Democrática de Catalunya (CDC) y la de laFundació CatDem,entidad privada relacionada con el partido que preside Artur Mas, por el presunto cobro de comisiones ilegales que habría abonado la constructora Seyco, propiedad de la familia Sumarroca,a cambio de obras públicas.

Varios agentes de la Guardia Civil se desplazaron después hasta el domicilio delextesorero de ConvergènciaDaniel Osàcar, acusado ya por el caso 'Palau', para llevar a cabo un nuevo registro. A primera hora de la tarde, se desplazó hasta la sede de CDC, para abrir un correo electrónico al que solo accede desde el edificio del partido.

Osàcar ya fue acusado por evasión fiscal y por cobrar comisiones de Ferrovial durante la última legislatura de Jordi Pujol, cuyo Gobierno otorgó a la constructora la construcción de la línea 9 de metro o la ciudad de la Justicia de Barcelona. Por aquel entonces, Convergència recibió 6,6 millones de euros en comisiones por parte de Ferrovial a través del Palau de la Música, según Anticorrupción.

El Instituto Armado también entró en los ayuntamientios de Lloret, Figueres, Sant Celoni y San Cugat, gobernado por Convergéncia cuando se produjeron la mayoría de las adjudicaciones que se investigan, en busca de los contratos firmados con Teyco allá por 2008 y 2009.'Petrum II'

La operación, que investiga un presunto delito con la administración pública y en la que no se esperan detenciones, está bajo secreto de sumario y solo tendría como objetivo recabar información para un caso de corrupción en el que ya han sido imputados tres miembros de la familia Sumarroca, fundadora de Convergència junto a Jordi Pujol, tras un año de pesquisas.

Anticorrupción acusó a Teyco, de la que Jordi Sumarroca -uno de los imputados- fue exconsejero, de pagar 1,4 millones de euros a cambio de adjudicaciones de obras públicas, tras encontrar evidencias de la que la fundación CatDem había participado como intermediaria en la operación para el pago de comisiones del 3% a Convergència.

Este supuesto cobro de sobornos tuvo uno de sus pasados episodios allá por 2005 cuando Pasqual Maragall, por entonces presidente de la Generalitat, aseguró que CiU tenía un "problema que se llamaba tres por ciento". Unas acusaciones que Artur Mas pidió que retirase puesmandaba a "hacer puñetas" "la legislatura" y la reforma estatutaria.

Mostrar comentarios