Luz verde judicial al rescate por el Estado de las dos primeras autopistas quebradas. El Juzgado de lo Mercantil número 6 de Madrid ha acordado la transmisión de la explotación de la Cartagena-Vera y de la circunvalación de Alicante a la Sociedad Estatal de Infraestructuras de Transporte Terrestre (SEITTSA), dependiente del Ministerio de Fomento. El juez no se pronuncia sobre la responsabilidad patrimonial del Estado (el coste de la construcción de ambas infraestructuras) que debe ser evaluada por el Ministerio de Fomento en el correspondiente expediente administrativo. Su resolución será recurrible ante los tribunales contencioso-administrativos.
El traspaso entrará en vigor la noche del 30 de marzo al 1 de abril. A partir de ese momento, los trabajadores, directivos y gran parte de los contratos civiles y mercantiles sobre la explotación y la conservación de las concesionarias concursadas -Autopista de la Costa Cálida y Ciralsa SA- pasarán a la empresa estatal. Los pagos a los acreedores concursales -privilegiados y ordinarios- solo tendrán lugar después de la valoración de la responsabilidad estatal y su confirmación o no por la jurisdicción contenciosa, cuando se reabrirá el proceso de concurso de acreedores.
La propuesta aprobada, de la Secretaría de Estado de Infraestructuras, establece que la empresa estatal no asumirá "ninguna obligación de pago de los créditos no satisfechos" por las concursadas ni ninguna responsabilidad por actuaciones de las concesionarias anteriores al 1 de abril, la fecha de la reversión de la concesión. Los contratos en los que SEITTSA decida no subrogarse se resolverán y deberán ser asumidos por las quebradas en el proceso concursal.
La responsabilidad patrimonial del Estado por la extinción prematura de los contratos debe compensar a las concesionarias por los gastos de construcción de la infraestructura. El departamento que dirige Íñigo de la Serna estimó hace una semana que el dinero que tendrá que abonar por el rescate de todas las autopistas superará con total probabilidad los 1.000 millones de euros que abonará el contribuyente. Ese dinero irá a las concesionarias rescatadas.
SEITTSA, la empresa pública que se queda con la concesión, prevé mantenerla hasta la aprobación de un nuevo concurso para adjudicarlas el próximo junio. De un lado se licitarán las autopistas de la costa levantina (Cartagena-Vera y circunvalación de Alicante) y de otro, las radiales de Madrid. Está previsto que la aprobación judicial del rescate de estas últimas se haga público en los próximos días.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios