La ministra de Exteriores dice que España sigue "firme" ante la violación de derechos en Irán

Madrid.- La ministra de Asuntos Exteriores, Trinidad Jiménez, ha asegurado hoy que el Gobierno español mantiene una actitud "muy firme" en la UE y en la ONU frente a la violación de derechos humanos por parte de Irán, exigiendo, por ejemplo, que continúen las sanciones a este país por su programa nuclear.

Así ha respondido la ministra durante la sesión de control al Gobierno en el Congreso al diputado popular Gustavo de Arístegui, quien le ha preguntado qué medidas piensa tomar el Gobierno para evitar que el régimen de Irán amenace a las embajadas extranjeras en Teherán o que este país siga siendo un elementos de inestabilidad e incertidumbre en la escena internacional.

Jiménez ha dado detalle sobre la detención, el pasado 14 de febrero, del cónsul español en Teherán, Ignacio Pérez Cambra, quien fue retenido por varios policías de paisano cuando se hallaba en los aledaños de la embajada española y trasladado a una comisaría de extranjería, donde fue liberado casi cuatro horas y media después sin que se le imputara ningún tipo de delito.

Un hecho "absolutamente inaceptable, muy grave", que "viola gravemente la Convención de Viena", en palabras de Jiménez, que ha explicado que desde el primer momento el Gobierno exigió a las autoridades iraníes una respuesta "clara e inmediata".

"La primera decisión que tomó el Gobierno fue llamar al embajador de Irán en Madrid para protestar enérgicamente por lo ocurrido, pedir explicaciones y que liberaran de manera inmediata a nuestro diplomático", ha continuado relatando la ministra.

De forma paralela, el embajador español en Teherán envió una nota de protesta al Ministerio de Exteriores iraní y se informó a la UE de lo sucedido, tras lo cual varios países -Francia, Holanda o Reino Unido-, convocaron al embajador de Irán en sus territorios para expresar su firme rechazo a la detención del diplomático español.

"La actitud del Gobierno ha sido firme y las medidas adoptadas tuvieron respuesta oficial en tiempo y forma suficientes", ha dicho la ministra, quien también ha explicado que la semana pasada recibió una llamada de su homólogo iraní, Alí Akbar Salehi, en la que éste le explicó lo ocurrido, le pidió disculpas y le indicó que se iba a abrir una investigación.

España, ha continuado, "mantiene una actitud muy firme con Irán frente a la violación de los derechos humanos, en el seno de la UE y de la ONU", y como ejemplo ha señalado su petición de que se mantengan las sanciones a este país por su programa nuclear.

Gustavo de Arístegui, por su parte, ha calificado la detención del cónsul como algo "gravísimo" y ha deplorado cómo el régimen "opresivo y bárbaro" iraní "se permite el lujo de amenazar permanentemente a la comunidad internacional y desafiarla con su delirio de programa nuclear".

"Además de haber sido firme en este caso, ¿qué medidas pretende tomar el Gobierno en la UE para evitar que el régimen teocrático y opresivo de Irán siga amenazando a las embajadas extranjeras en Teherán, y que siga siendo un elemento fundamental de inestabilidad, incertidumbre y violencia en la escena internacional?", le ha preguntado.

El diputado ha remarcado que el desconocimiento de la Convención de Viena por parte de los policías que detuvieron al cónsul no les exculpa de los hechos y no resta gravedad al incidente.

Por ello, ha exigido al Gobierno que siga vigilante y firme, y ha instado a todos los países de la UE que tengan en cuenta que el régimen iraní "es un serio riesgo para la estabilidad y paz mundial".