La mitad de los refugiados de Mali no están inscritos en el censo electoral

Ginebra, 23 jul.- Más de la mitad de los refugiados malienses no están inscritos en el registro civil (RAVEC) para poder votar en las elecciones del 28 de julio, informó hoy el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).

El pasado mes de junio las autoridades malienses visitaron a los más de 173.000 refugiados que se encuentran en Burkina Faso, Mauritania y Níger -de los que unos 73.000 se encuentran en edad de voto- y un total de 19.020 mostraron su interés de participar en las elecciones.

"Sin embargo, sólo 876 de los 3.500 refugiados registrados en Burkina Faso se encuentran en el RAVEC; en Mauritania, 8.400 de 11.300, y en Níger, 932 de 4.161. Es decir, sólo la mitad de los que desean votar se encuentran en el registro electoral", expresó en rueda de prensa el portavoz del ACNUR, Adrian Edwards.

Además, Edwards declaró que las autoridades malienses apenas han repartido cartas de votación entre los refugiados en estos tres países vecinos.

"Es urgente que las autoridades publiquen rápidamente las listas de votantes, actualizadas por última vez en el año 2011, y que repartan las tarjetas electorales, especialmente en los campos de refugiados y áreas remotas", sentenció el portavoz.

Los comicios se celebrarán en Mali el próximo 28 de julio en medio de la crisis en la que el país se encuentra sumido desde comienzos de 2012.

Una mujer y cuatro antiguos primeros ministro figuran entre los 28 candidatos en las elecciones, cuya campaña electoral comenzó oficialmente el pasado domingo 7 de julio.

El desarrollo de las elecciones será vigilado por una misión de 90 observadores de la Unión Europea, de los cuales 20 ya se encuentran en distintas ciudades el país.

Mali está sumido en una profunda crisis tras el golpe militar que depuso, el 22 de marzo de 2012, al presidente Amadou Toumani Toure.

Varios grupos fundamentalistas, entre ellos Al Qaeda para el Magreb Islámico, se aprovecharon del caos reinante para ocupar las principales ciudades del norte del país, imponiendo la ley islámica a la población.

El pasado 11 de enero, y a petición de las autoridades locales, el Ejército francés lanzó una operación para recuperar el control y echar a los yihadistas.