La policía desmantela una casa búnker en la cañada real utilizada para la venta de droga

Agentes de la Policía Nacional han desmantelado una vivienda bunkerizada utilizada para la venta de droga en la Cañada Real de Madrid.
Según informó este sábado la Policía, en la operación han sido detenidas siete personas y se han intervenido varios utensilios para la manipulación y distribución del estupefaciente. También se han decomisado cerca de 500 euros en monedas y billetes de pequeño valor facial procedentes de la venta del estupefaciente.
Entre los arrestados hay varios “machacas” que ejercían funciones de vigilancia en las inmediaciones a cambio de su dosis diaria, así como un individuo detenido meses atrás por su vinculación con el desarticulado “Clan de los Gordos”.
La permanente investigación en la zona, así como las informaciones recibidas por los agentes desde el pasado mes de noviembre, llevaron a los policías hasta una parcela de la Cañada Real donde se distribuía droga. Los investigadores comprobaron que la venta se realizaba durante las 24 horas del día y que existían “turnos de trabajo” para suministrar el estupefaciente. En el exterior de la parcela, varios toxicómanos -conocidos en el argot como “machacas”- ejercían funciones de vigilancia y control de la zona a cambio de sus dosis diarias.
La parcela contaba con dos viviendas, una de ellas bunkerizada y protegida para evitar cualquier tipo de operación policial. Con el preceptivo mandamiento judicial, y tras establecer un amplio dispositivo, se procedió a la entrada en la casa. Las medidas adoptadas por los narcos hicieron necesario emplear la fuerza para derribar las distintas puertas blindadas y reforzadas con que contaba el inmueble.
Una vez los agentes lograron franquear la entrada, observaron gran cantidad de humo. Los arrestados habían arrojado la sustancia estupefaciente a una estufa. Tanto las cenizas como los utensilios intervenidos que utilizaban para manipular y distribuir la droga dieron positivo en cocaína y heroína una vez practicado el narco-test.
El búnker estaba diseñado como si de un comercio se tratase. La venta se realizaba a través de un ventanuco enrejado que, a su vez, daba a un habitáculo donde accedían los compradores y que era utilizado como fumadero donde los toxicómanos consumían la sustancia adquirida.
Los policías detuvieron a los responsables de la venta del estupefaciente además de a varias personas que realizaban tareas de vigilancia que no dudaban en utilizar la violencia para proteger las actividades del clan familiar de narcotraficantes. Todos los arrestados han sido puestos a disposición judicial.
La operación ha sido llevada a cabo por el Grupo de Policía Judicial de la Comisaría de Villa Vallecas, perteneciente a la Jefatura Superior de Policía de Madrid, y ha contado con la colaboración del GOIT, la UIP, los Guías Caninos y la Policía Municipal de Madrid.