La respuesta de Rajoy a la comparecencia de Zapatero sobre el paro: pedir elecciones

La intervención del líder de la oposición, Mariano Rajoy, ha sido exactamente igual que la del Debate sobre el estado de la Nación: críticas a Zapatero y, al final, petición de elecciones generales. Las únicas diferencias: que ha tenido lugar en el marco de una comparecencia dedicada al paro y que, en esta ocasión, su respuesta ha sido mucho más breve.

Ha empezado Rajoy recordando que Zapatero estaba en el Congreso por la petición de comparecencia del PP, aunque la pidieron también otros grupos, como PNV y CiU, y criticando que el presidente se ha vuelto a "refugiar en un futuro" para "su nueva versión de la esperanza"

El líder del PP ha destacado que, cuando se inició la crisis, España tenía menos paro que Francia, Alemania y ahora el doble que ambos países. "Somos el mal ejemplo", ha dicho, "heredó un país próspero y lo deja en la ruina"

Críticas y elecciones anticipadas

Rajoy ha repasado algunas de las promesas del presidente en materia de empleo, como cuando hace dos años prometió crear dos millones de nuevos empleos, o cuando dijo que 2010 sería el año de la recuperación económica, o que en abril la tasa de paro iba a tocar techo. "¿Qué pensaría usted del gobernante que hubiera cortejado con estos camelos el oído de los españoles?"

Después se ha centrado en los "derroches" del Gobierno, como los carteles del Plan E o la Ley de Economía Sostenible "que sigue en tramitación cuando la anunció hace más de un año y medio", y ha recordado el último anuncio de Zapatero de que la economía verde creará otro millón de empleos: "¿Cuántas veces se ha puesto el sol sobre sus promesas, señor Zapatero?", ha dicho.

El líder del PP ha criticado que Zapatero no haya anunciado nada que permita tranquilizar a los mercados, aunque sí haya insistido en viejos argumentos: "¿Cuántas veces nos ha anunciado la reforma de la energía? ¿Cómo le vamos a creer?", ha dicho Rajoy, para quien Zapatero "no inspira confianza" porque "no dice la verdad, ni reconoce los hechos, ni facilita soluciones".

Rajoy ha concluido su breve intervención diciendo que la única forma de que se nos tome en serio dentro y fuera de España es señalar "un punto y a parte" y hacer un nuevo Gobierno, pidiéndole que "se retire" y convoque elecciones porque un gobernante "que fracasa tiene la obligación moral de renunciar" aunque la ley no le obligue.