La UE descarta una oleada migratoria inminente y pone en suspenso su respuesta

Bruselas.- Los ministros de Interior de la Unión Europea (UE) han descartado hoy una oleada migratoria inminente procedente del norte de África y han puesto en suspenso la adopción de nuevas medidas de respuesta a esa eventualidad.

Los países de la UE han sido informados del desarrollo de la operación "Hermes" de la agencia de control de fronteras (Frontex) en la isla italiana de Lampedusa, donde han llegado procedentes de Túnez alrededor de 6.300 personas desde el inicio de las revueltas en el país.

Los Veintisiete han analizado tanto el caso concreto de Italia como, más allá, las medidas preventivas a tomar ante una situación de guerra civil en Libia, dada el elevado número de inmigrantes subsaharianos residentes en Trípoli, que podrían dirigirse a la UE debido a la situación.

Los Veintisiete se han mostrado "preparados" para extender la misión Hermes "si es necesario", ha apuntado la comisaria europea de Interior, Cecilia Malmstrom, que ha mostrado su "apoyo a los que se manifiestan por la libertad".

En la misma línea, el vicepresidente primero y ministro del Interior español, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha señalado que "la UE debe estar preparada" para el caso que se produzca una avalancha procedente de Libia, principalmente, así como del resto del norte de África.

Tanto la CE como la delegación española han subrayado el espíritu de "solidaridad" con Italia, si bien no se ha decidido extender los fondos comunitarios para refugiados que había reclamado el ministro del Exterior, Franco Frattini.

Italia ha explicado a sus socios que pese a que llegaron 3.000 personas tras el primer fin de semana de revueltas, el número de entradas se ha ido reduciendo los últimos días.

La agencia de control de fronteras exteriores de la UE (Frontex) ha solicitado la asistencia de Europol para que la criminalidad internacional no se aproveche del éxodo.

"No vamos a tolerar que las mafias internacionales hagan su agosto aprovechando las aguas revueltas", ha afirmado contundente Rubalcaba, que ha señalado sin embargo que "esa misma firmeza a la hora de proteger las fronteras se tendrá para dar refugio a los que los soliciten".

"Europa es tradicionalmente un territorio de acogida", ha añadido el ministro español.

Los Veintisiete no han tomado en consideración la posibilidad de movilizar una operación militar, ni tampoco utilizar una directiva de 2001 para dar protección por un año a los norteafricanos que se dirijan hacia la UE.

Y es que Malmstrom ha reiterado que si bien se ha detectado un flujo migratorio de Libia a Túnez y Egipto, no se ha experimentado todavía un fenómeno similar entre esos países del norte de África y la UE (con la excepción de los tunecinos que se han dirigido a Lampedusa).

El vicepresidente del Gobierno español ha informado que esta tarde ha partido de Trípoli rumbo a Torrejón de Ardoz (cerca de Madrid) un nuevo avión militar con 50 españoles.

El gabinete de la alta representante de la UE, Catherine Ashton, ha explicado a los ministros que todavía quedan alrededor de 1.000 ciudadanos comunitarios en Libia.

La comisaria ha señalado que las prioridades más urgentes son "la evacuación de los europeos" así como "la asistencia humanitaria" en Libia, donde la situación es "preocupante y alarmante".

Ni Malmstrom ni Rubalcaba han querido valorar las cifras de Frontex que cuantificaban ayer la potencial llegada de inmigrantes a la UE entre 500.000 y 1,5 millones.

"No nos anticipemos a los acontecimientos", ha pedido Rubalcaba.