Varsovia, 29 sep.- El presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, y el primer ministro polaco, Donald Tusk, reiteraron hoy que la UE no hará concesiones al régimen de Alexander Lukashenko, presidente de Bielorrusia y considerado último dictador de Europa, hasta que los presos políticos no sean liberados.
Tusk y Van Rompuy hicieron estas declaraciones después de mantener una reunión con líderes de la oposición bielorrusa en Varsovia, donde se celebra hoy y mañana la cumbre entre la UE y seis exrepúblicas soviéticas: Armenia, Azerbaiyán, Bielorrusia, Georgia, Moldavia y Ucrania.
La reunión precedió a la cena que esta noche reunirá a los participantes en la cumbre de la Asociación del Este y representantes de los Veintisiete.
Esta iniciativa pretende articular un acercamiento entre esas seis repúblicas y la Unión Europea, además de estimular la democratización en la región dentro de la política de vecindad comunitaria.
Van Rompuy explicó que la UE no puede "participar en apoyo de Bielorrusia si no ve un claro avance en materia de derechos humanos en ese país", lo que significa "la liberación inmediata y la rehabilitación de todos los presos políticos", precisó.
El presidente de Bielorrusia no está invitado a la cita, ya que se encuentra en la lista de miembros de su Gobierno con entrada vetada a la UE a causa de las políticas represivas contra opositores al régimen.
Tampoco el ministro de Exteriores bielorruso asistirá a la cumbre, sino que en principio será el embajador de ese país en Polonia, Victor Gaisenok, quien encabece la delegación de la exrepública soviética.
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