Las 13 razones por las que no hay que darle la espalda al pan

¿De verdad el pan es tan enemigo de las dietas como muchos y muchos se creen? Pues parece ser que no. Todo aquel que sea de los que en plenas vacaciones evita comer pan porque se cree que va a engordar menos comete el error de darle la espalda a una serie de nutrientes que más que perjudiciales parece beneficiar a la salud. Aporta energía y muy muy poca grasa.

El pan es una fuente importante de hidratos de carbono complejos y, según señala la campaña 'Pan cada día', junto con los cereales como el arroz y la pasta son una fuente importante de hidratos de carbono. Los expertos en nutrición aconsejan tomar entre cinco y seis raciones al día de estos alimentos para completar el 50% de calorías totales que deben proceer de hidratos de carbono en una dieta equilibrada. Si faltan hidratos de carbono, la alimentación se desequilibra y se tiende a consumir más proteínas y grasa.

Según la OMS, lo aconsejable es tomar entre 220 y 250 gramos diarios, mientras que los españoles consumen unos 150 gramos al día.

Los expertos aconsejan no darle la espalda al pan. Es incluso "indispensable" en una alimentación equilibrada y variada, según aseguró la profesora titular del departamento de Nutrición de la Facultad de Farmacia de la Universidad Complutense de Madrid, Beatriz Navia.

¿Pero el pan engorda? Navia es clara: "Ningún alimento engorda o adelgaza por sí mismo, y el pan no es la excepción. Lo que hace que aumentemos de peso es consumir más calorías de las que gastamos. El pan debe formar parte de nuestras vidas y es un producto indispensable en una alimentación equilibrada y variada".

El pan, especialmente el integral, contiene una cantidad "importante de fibra", que posee un efecto saciante, al tiempo que reduce la absorción de grasas.

El pan también contiene vitaminas B1, (desempeña un importante rol en el sistema nervioso y su déficit da lugar a la falta de concentración y a alteraciones en la memoria) B2 ((participa en la producción de glóbulos rojos y actúa como antioxidante y tiene una acción vasodilatadora) , B6, niacina y ácido fólico (esencial en el cre cimiento).

El pan aporta fósforo, potasio, yodo, magnesio (que favorece el crecimiento), calcio, selenio (relacionado con el retraso del envejecimiento celular), zinc (que contribuye a aumentar la inmunidad del organismo) o magnesio, que favorece el crecimiento.

Y por si había alguna duda, la corteza contiene más calorías que la miga ya que, aunque son parte del mismo alimento y contienen los mismos nutrientes, la corteza se deshidrata en el horneado, mientras que la miga conserva el agua.