Las duras medidas de Hungría contra los refugiados

El gobierno húngaro no quiere que los refugiados entren en su país. Así lo demuestra con cada una de las polémicas medidas que su gobierno ha aprobado desde hace unas semanas. ¿La última? El primer ministro húngaro, Viktor Orban, enviará al Ejército a la frontera sur del país a partir del 15 de septiembre para controlar el flujo de inmigrantes si el Parlamento apoya esta medida.

"Vamos a enviar a la Policía y después, si conseguimos la aprobación del Parlamento, enviaremos al Ejército", ha indicado. "No son 150.000 (inmigrantes y refugiados) los que algunos quieren dividir por cuotas. No son 500.000, una cifra que he escuchado en Bruselas, sino que son millones y después decenas de millones, porque el flujo de inmigrantes no tiene fin", ha apostillado.Cinco años de cárcel por entrar ilegalmente

El viernes pasado, el parlamento húngaro aprobó una serie de modificaciones en su ley penal para endurecer las penas relacionadas con la entrada no autorizada en el país. De esta manera, el cruce ilegal de sus fronteras podría suponer de tres años de cárcel, cinco si al pasar se daña la valla alambrada en la frontera con Serbia, que está construyendo Hungría desde que comenzara el éxodo desde Siria.

En este muro, además, se creará una franja de 60 metros llamada "zona de tránsito", que solo estará abierta hacia Serbia y donde se realizará el registro de los refugiados o inmigrantes.20 años de prisión por tráfico de personas

También se endurecerán las penas por el tráfico ilícito de personas, con penas que pueden ascender hasta los 20 años de cárcel, y se regulará la "situación de crisis por inmigración masiva", similar a un estado de alerta, que el Gobierno podrá declarar por un período de un máximo de 6 meses.

Orban, del partido Alianza Cívica Húngara (Fidesz), ha relacionado en anteriores ocasiones inmigración y terrorismo e incluso ha provocado tensiones con países vecinos por defender la idea de la Gran Hungría que incluya a las minorías húngaras de países como Rumanía.