La nueva vida de Pablo Iglesias se acompaña de teoría cinematográfica. El que fuera vicepresidente segundo, ministro y exsecretario general de Podemos ha posado para el fotógrafo Daniel Gago leyendo '¡Me cago en Godard!', un libro del periodista de La Vanguardia Pedro Vallín. Ha sido este mismo medio el que ha publicado las imágenes, adjuntas al artículo del mismo periodista que ha escrito el libro que lee Iglesias. Ambas imágenes muestran la nueva imagen de Iglesias, con el pelo corto: retirado de la política, retirado de su coleta.
El libro en cuestión hace una reflexión sobre el cine, en concreto Hollywood, y la formación 'izquierdista' y progresista de sus películas. Examina en profundidad sobre dicha industria, sus arquetipos y analiza los entresijos del amplio debate entre producto y arte en el cine. Una lectura 'provocativa' ya desde el mismo título, que Iglesias degusta ahora tras decidir dejar todos sus cargos como político tras los resultados de las elecciones autonómicas de Madrid.
En un primer momento, Iglesias sorprendió anunciando su salida del Gobierno de Pedro Sánchez para encabezar la candidatura morada a la Comunidad de Madrid, en un intento por mantener el espacio de su formación política al tiempo que se planteaba como objetivo frenar a la derecha de Isabel Díaz Ayuso (Partido Popular) y a la extrema derecha de Rocío Monasterio (Vox).
Aunque Iglesias logró incrementar los escaños de su formación, hasta 10 diputados (antes tenía 7), el fracaso de los partidos de izquierda en su intento dar un vuelco al Gobierno regional, desbancando al PP, llevó al político a renunciar a todos sus cargos tanto en el partido como a nivel político, pasando a un segundo plano y dejando a la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, como pilar fundamental de UP en el Ejecutivo.
Iglesias, desde su juventud, había lucido una voluminosa coleta que terminó recogiendo en un contundente moño. Con coleta tomó posesión como eurodiputado, diputado, ministro y vicepresidente segundo. Ahora, el exlíder morado prepara su nueva etapa al margen de la política, en la que podría formar parte de algún programa en el que se analicen temas periodísticos y de actualidad, al tiempo que regresaría a su actividad como profesor en la Universidad Complutense de Madrid.
