El grupo, que salió el lunes de Fua y Kafraya en la provincia de Idleb (noroeste), llegó este martes a la región de Sayida Zeinab, al sur de Damasco, según una fuente conocedora de la operación.
Las autoridades previeron una fiesta oficial para celebrar su evacuación, precisó esa misma fuente.
Las 338 personas eran parte de los más de 450 combatientes y civiles, incluidos heridos, que fueron evacuados el lunes de tres localidades sirias, en virtud de un acuerdo cerrado en septiembre entre los rebeldes y el régimen de Bashar al Asad.
El pacto preveía una tregua en Zabadani, última ciudad en manos de los rebeldes en la frontera entre Siria y Líbano, que llevaba meses sitiada por las fuerzas del presidente Asad.
A cambio, también se observaba un alto el fuego en Fua y Kafraya.
Tras el cese de los combates y la llegada de ayuda humanitaria en esas localidades, se comenzó a evacuar a civiles y combatientes.
Los residentes y combatientes de ambos pueblos fueron conducidos primero a Turquía, donde tomaron un avión rumbo a Líbano, antes regresar a la capital siria por carretera.
Entretanto, unos 126 sirios de Zabadani fueron trasladados al aeropuerto de Beirut desde donde volaron a Turquía, antes de dirigirse a zonas controladas por los rebeldes en el norte de Siria.
En un comunicado conjunto, Naciones Unidas en Siria, la Media Luna Roja siria y el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) anunciaron haber facilitado con "éxito" la operación de evacuación.
"Ayer tuvimos la posibilidad de dar ayuda, comida y agua, pero en poca cantidad", indicó a la AFP un portavoz del CICR, Tareq Wheibi.
"Hay que hacer muchas cosas y esperamos que sea posible la próxima semana. Esperamos el visto bueno" de ambas partes, añadió.
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