La mayoría en Arguineguín

Llegan cinco pateras a Gran Canaria y Fuerteventura con casi 150 migrantes

La segunda embarcación irregular llegó al muelle de Arguineguín luego de que Salvamento Marítimo los rescatara, y fue la única con pasajeros que requirieron traslado al hospital, que sumaban ocho.

Rescatadas en buen estado de salud 42 personas que navegaban en una patera por el mar de Alborán
El Gobierno ha asegurado que los realojos forman arte de una estrategia temporal.
SALVAMENTO MARÍTIMO

Casi 150 migrantes han llegado en cinco pateras a Gran Canaria y Fuerteventura. Ocho de los pasajeros tuvieron que ser trasladados a diferentes centros hospitalarios, dos en estado grave. Así lo ha informado el Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad (Cecoes) 112, que destaca que la primera de estas embarcaciones irregulares arribó por sus propios medios hasta la costa del municipio de Santa Lucía con 21 personas, todas en aparente buen estado de salud.

Posteriormente llegó al muelle de Arguineguín una patera rescatada por Salvamento Marítimo en aguas al sur de la isla con 30 migrantes. Fue aquí, donde hubo que evacuar a ocho personas hasta un hospital, por diversas patologías, dos de ellos graves. Además, una tercera embarcación con 45 personas fue trasladada también hasta el mismo recinto portuario tras ser interceptada a unas cinco millas al sur de Gran Canaria, estando todos en buen estado de salud.

Horas después, otra embarcación con 24 varones de origen magrebí ha sido interceptada en aguas canarias y sus ocupantes han sido trasladados hasta el muelle de Arguineguín, donde han llegado en aparente buen estado de salud. Además, Salvamento Marítimo ha interceptado otra patera con 26 migrantes de origen subsahariano. Todos ellos han sido trasladados al muelle de Gran Tarajal, donde han sido atendidos por personal sanitario del dispositivo de emergencias, aunque ninguno de ellos ha precisado traslado a un centro hospitalario.

El Gobierno ha asegurado que los realojos en el campamento de Barranco Seco y en hoteles y albergues forman arte de una estrategia temporal que irá acompañada con repatriaciones en los casos que no tengan derecho a la protección internacional. La CEAR (Comisión Española de Ayuda al Refugiado) teme que las instituciones europeas conviertan a Gran Canaria en un punto donde España retendría a los inmigrantes para impedir su llegada al continente.

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