Lopera dice que el nuevo peritaje demuestra que no perjudicó al Betis

Sevilla, 4 jul.- Manuel Ruiz de Lopera, ex máximo accionista del Betis, ha afirmado hoy que los presuntos perjuicios causados al club y recogidos en el segundo informe de los peritos judiciales "son falsos", como también lo son las acusaciones vertidas en la primera entrega del peritaje.

En un comunicado remitido a Efe, Ruiz de Lopera indica que, junto a la segunda parte del informe, los peritos han entregado una ampliación del primero, solicitada por el fiscal, que afecta a "cuestiones cruciales y acredita fehacientemente, ya sin el menor margen a la duda, la falsedad de la primera parte del informe".

Entre otros, recoge que los peritos "consideran innecesarios y productores de perjuicios para el Real Betis gastos tales como las retribuciones laborales de la totalidad del personal que atendió el estadio en los más de 200 partidos de fútbol disputados entre 1993 y 1999 -unas 40 personas, desde los encargados de las puertas hasta los responsables de los vestuarios- el equipamiento del gimnasio de la ciudad deportiva o la maquinaria para el cuidado del césped del estadio".

La segunda parte del informe de los peritos judiciales que han analizado las cuentas del Betis, entregado ayer, concluyó que la gestión de Lopera en el periodo 1999-2008 causó al club perjuicios de 17 millones de euros, que se unen a los 12,4 millones de los años 1992-1998.

Afirma el comunicado que la segunda parte del informe, siguiendo la línea de la precedente, refiere también unos "perjuicios multimillonarios" al Real Betis que son igualmente falsos y que Lopera afirma que "demostrará ante la autoridad judicial oportuna".

"Nunca me lucré a costa del club ni lo perjudiqué patrimonialmente en modo alguno", afirma Ruiz de Lopera.

El ex máximo accionista del Betis ratifica "su plena confianza en la Administración de Justicia" y anuncia su "decidida voluntad de exigir las responsabilidades que en Derecho procedan a quienes se hayan apartado de la ley en su actuación para exigir la plena reparación de los graves perjuicios personales y patrimoniales" que las acusaciones le han causado.