Vigo.- Silvia Albes, la esposa de Pablo Costas, uno de los tripulantes del "Alakrana" ha manifestado hoy a EFE que los familiares de los marineros intentan "hacer vida normal para tratar de olvidar la situación".
Ha reconocido que la intranquilidad y el nerviosismo son las notas dominantes desde el momento que tuvieron noticia de que el buque había sido secuestrado por un grupo de piratas somalies.
Albes Vázquez ha confirmado que desde ayer a mediodía, cuando el patrón del buque, Ricardo Blach habló con su familia, no habían tenido ningún otro contacto telefónico, aunque sí han recibido llamadas de la empresa, del Gobierno vasco y del Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino.
La esposa de Pablo Costas ha indicado que no tenía ninguna información sobre posibles gestiones para pagar un rescate por el barco, y ha añadido que desde la empresa les pidieron "tranquilidad y paciencia", al tiempo que les "dan ánimos para afrontar la situación".
En sus declaraciones Silvia Albes ha indicado que intentan volcarse en los quehaceres diarios para tratar de distraerse, aunque reconoce que es muy difícil, y ha subrayado que a medida que pasan las horas el cansancio y el nerviosismo van haciendo mella en tripulantes y familiares.
"Nuestro único deseo es que esto acabe cuanto antes y que recibamos una llamada en la que se nos diga que se terminó la pesadilla", concluyó.
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